Mi pequeño Jinete - Relatos Eróticos

Mi pequeño Jinete

Me llamo Lola, y tengo 44 años.Me gustaba estar en las páginas de contacto y sentir como los chicos me escribían y cortejaban; aunque, lamentablemente ninguno era capaz de ofrecerme una relación seria...además, el hecho de estar casada influye muchoY DE PRONTO, apareció él en mi vida. Era otro chico veinteañero (24 años, 20 menos que yo) más que me escribía por la página de contactos. Al principio no pensaba quedar con él, pero fui cogiéndole cariño hasta el día de nuestra cita...Era un chico muy guapo; bajito y delgadito, pero con unas espaldas muy fuertes; además, era un chico muy inteligente y simpático. Lamentablemente, como no era un chico que estaba dentro del prototipo de hombre de España, pues había estado con muy pocas chicas...Cuando nos vimos, tenía claro que jamás tendría nada con él, pues buscaba como amante (o uno de mis amantes) a otro tipo de hombre, más maduro...y así se lo hice saber.Nos fuimos a mi casa para tomar una copa y hablar más tranquilos mientras veíamos la televisión. Mi marido no estaba, pero sí el padre de mi marido, que vive con nosotros, asi que intentamos no hacer ruidoLe volví a advertir que nunca tendría nada con él...hasta que empezó a hacerme un masaje. Jamás me había hecho un masaje así; lento, tocando mi cuerpo lentamente durante minutos...ME FUI ABANDONANDO Y DEJANDO QUE ÉL DECIDIERA POR MÍ; Sentía tanto placer que no podría negarme a que comenzara a tocarme todo el cuerpo...Por momentos me tocaba mis tetas, luego empezó a bajar hasta ...

... llegar a mi vagina, la cual acarició lentamente, empezando por la pelvis, rodeando los labios vaginales, hasta acabar introduciéndome un dedo. Y ME BESÓMe abandoné totalmente a su voluntad. Comenzó a hacerme sexo oral, tan bien que me sorprendió, puesto que era un chico que había estado con muy pocas mujeres. Me besaba por todo el cuerpo, desde los pies hasta mi frente. Me llevó hacia mi cama, con precaución de no hacer mucho ruido por el pasillo para no despertar a mi suegro, y comenzó a penetrarme.Por delante, por detrás...me encantaba como lo hacía; y otra vez me pareció extraño que lo hiciera tan bién un chico que había estado con tan pocas personas...Era muy mandón, y todo lo quería hacer él. Me decía que le gustaba sentir que daba placer a una mujer...Y VAYA QUE LO DABA! Me encantó cuando me puso a cuatro patas y empezó a metérmela despacio, muy despacio. Mi coño rozaba con su polla durante mucho tiempo al metérmela tan lento...A él le exitaba mucho, puesto que así le llegaba más olor a coño (que le encanta)Tras follar durante una hora y media, me corrí 6 veces, y él aun seguía empalmado, sin correrse. Me dejó agotada, sin poder follar más. Se masturbó y se corrió en mi boca y mis tetas, y aun seguía empalmado, asi que volvimos a follar...aunque está vez no pude más que media hora. Entonces, él se marchó, aun empalmado a su casa, puesto que mi suegro se despertaría en pocoY desde entonces, llevo un mes con mi jinete. El quiere montar a todas las mujeres que ve (por eso ...