AZOTANDO A MI ESPOSA - Relatos Eróticos

AZOTANDO A MI ESPOSA

Esperé en el bar desde las 8 de la mañana, desayune, fue pasando el tiempo, sobre las 11 de la mañana me tome dos chupitos de whisky para armarme mas aun de valor y volví no metí el coche en el garaje, entré por la pueta pequeña de él sabía que esa no la cerraria por dentro la principal si para asegurarse, subí nervioso entreabrí la puerta que da hacia el peuqeño vstibulo y salón desde el garaje, había contactado con uno si y hacia tiempo, en esos momentos se estaba azotando frente a él sus nalgas puesta a 4 patas bien abierta ante la camara. Todo ocurrió muy rapido, fuí hacia ella solo le dió tiempo de dar un grito, con una mano la cogí del pelo fuerte impidiendo que se levantase, con la otra cerré de golpe el ordenador, ella empezó a balbucear pero a su vez yo le tiraba del pelo fuerte yo de pie, sin dejarla que se incorporase, tuvo que caminar, apenas esos tres pasos hacia el sofá, todo iba muy rapido solo se escuchaba a ella pero no decia palabras sino balbuceaba por el dolor, a su vez yo me quitaba el pantalón que cayó hasta los tobillos, a su vez con los pies me deshice de los zapatos y antes de sentarme ya tenia el slip bajado a su vez que tirando de ella e itentandola colocar la inmovilicé con mis piernas las suyas quedando su culo a mi disposición pero en esos momentos era como gritaba, mi tiron de pelos casi sin darme cuenta era ya muy muy fuerte, mi slip estaba en la otra mano se lo fuí metiendo en su boca, ella lo aceptó sin apenas oponerse, en segundos lo ...

... tenia todo metido en la boca como una bola, la hice tirarse aun mas hacia delante, ahora su culo quedo ante mi de tal forma que lo veia mas que perfecto, mi mano le pegó fue como si yo no lo hubiera hecho sino otra persona pero a su vez subió en mi desde mi vientre un cosquilleo enorme, vi como si fuera a camara lenta como mi mano se hundia en su carnosa nalga, a su vez el grito de ella, me fue ya imposible parar, la mano me dolía de lo fuerte que le daba pero a su vez deseaba más y más ella gritaba hasta el punto de tener que escupir mis slip de su boca sus nalgas intentaban quitarse y casi lo conseguian pero rapidamente yo la volvia a su lugar y de nuevo ella esperabá el golpe, me percaté que en realidad lo quería, se sometía, hasta el punto de terminar llorando de dolor pero quieta y yo ya parado ahora apoyada mi espalda en el sofa sin soltarle el cabello pero observando relajado, su sometimiento y sintiendo un placer infinito y desconocido hasta ese momento. La solte pero solo para hacer que se quedara tumbada en el suelo bocabajo, mi pie, se apoyó en su espalda hasta presionarla fuerte despues puse el pie en su mejilla veia su teta apretarse contra el suelo, pensé en ellas le iba a tirar de los pezones bien fuerte mas de lo que le habia visto hacerse a ella, la hice quedarse de rodillas frente a mi, solo llevaba un body negro y medias, no habia hablado nada, con ella, la miré ella callada, le saqué una de sus voluminosas tetas con dos dedos cogí su pezón fui tirando pronto ...