1. El hombre difuso...


    Fecha: 13/04/2018, Categorías: Gays Autor: renovatio111, Fuente: xHamster

    Fabio se recostó en el diván y cerró los ojos mientras Robert, su psiquiatra, cerraba la puerta con pestillo.- ¿Qué tal la semana? –preguntó Robert, con aire distendido.- Como siempre. Mucho trabajo y poco sosiego. ¿La suya?- Muchos pacientes, no puedo quejarme.- ¿Alguno como yo?- Absolutamente ninguno.En realidad, Fabio ya no era paciente. Hacía meses que no necesitaba seguir viendo a Robert, (de hecho el psiquiatra ya no le cobraba las visitas), pero ambos mantenían el ritual porque les resultaba muy placentero.- Bueno, cuéntame. ¿Has vuelto a tener uno de tus inquietantes sueños?- Esta semana he tenido tres.Fabio escuchó como Robert se sentaba en su sillón y sonrió, sabiendo que lo que acababa de decir no podía complacer más al médico.- Empieza por el primero. Cronológicamente.- Bien. En el primer sueño yo no era una persona.- ¿Y qué eras?- Una enorme polla. Un descomunal falo de cinco pisos de altura.- ¿Un falo con la textura de un dibujo animado, como aquella otra vez?- No, no. Esta vez soñaba con la textura de la realidad. Yo era una polla descomunal, de hecho creo que era la polla de Marcelo, la primera que mamé.- Interesante.- Marcelo era mulato, así que en el sueño yo era una polla mulata y gigantesca.- ¿Estabas estático, como una montaña?- No, qué va. Avanzaba por una ciudad, destruyendo todo a mi paso. No sé si mis cojones eran las ruedas, solo sé que me desplazaba a toda velocidad, arruinando las calles, los parques, las farolas, mientras rezumaba leche sin ...
    ... parar, que caía en inmensos goterones sobre la gente que huía desesperada. Era insoportable porque era consciente de que me corría continuamente, de que no podía parar de correrme y sentía el orgasmo en oleadas, subiendo y bajando de intensidad pero presente todo el tiempo. Yo era una polla, así que sentía el orgasmo con todo mi cuerpo. Y avanzaba, y avanzaba, y seguía eyaculando. Entonces me desperté de golpe, como siempre, y comprobé que Juan me estaba haciendo una de sus mamadas. Ya empieza a ser un hábito. Dice que le despierto porque empiezo a hablar en sueños, súper agitado, y que cuando comprueba que estoy empalmado es superior a sus fuerzas y me la tiene que comer.- ¿Te corriste al despertar? ¿Te estabas corriendo en realidad?- No. Bueno, casi. Juan suele centrarse en el glande, insistentemente. A veces tanto rato que no puedo soportarlo. Era una de esas veces.- ¿Te lo follaste?- Le metí dos dedos por el culo mientras él me la comía y se lo trabajé a fondo, pero al final me hizo que me corriera sin haberle metido el rabo.- ¿Cuándo tuviste ese sueño?- El miércoles pasado.- ¿Después de nuestra consulta?- Claro.- Cuéntame el siguiente.- El siguiente fue a la noche siguiente. Estaba en casa de mis padres, atrapado en la mesa de cristal del salón.- ¿Atrapado en la mesa? ¿Como dentro de una caja de cristal?- No. En realidad estaba atrapado en el cristal. Algo parecido a cuando haces el muerto boca arriba en una piscina, pero en lugar de agua, a mi alrededor estaba el cristal de ...
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