Una gran sorpresa - Relatos Eróticos

Una gran sorpresa

A veces resultaba hasta divertido tener que caminar entre los escombros, herramientas, lodo hombres trabajando y hasta hoyos frente a nuestros pasos. Mi trabajo es en casa, pero salgo a hacer clientes para los cuales diseño su publicidad, por lo tanto no pasó diario esa molestia Cierta tarde, al correr la cortina de mi ventana, descubrí un hombre como de 50 años tras un vehículo, qué gustoso se masturbaba, y me quedé observando, el calor del deseo afiebro mi cabeza, mayormente cuando lanzó su Descomunal descarga de semen, Uuff. Abundantes y Fuerte. qué llegaron al metro y medio, después tan sólo guardó su verga sin haberla limpiado y tanto la acción como su rostro quedaron en mi mente, Uuff. Pasaron 3 días, cuando alguien llamó a la puerta, era el Ingeniero acompañado de este tipo, y me pidió permiso para guardar la herramienta más llamativa y costosa, dentro de mí cabeza brilló la oportunidad de poder tratar al tipo este, el Ingeniero me indicó que sólo Agustín sería el encargado de la misma, y después de aceptar, Agustín pasó el día metiendo la herramienta, Lo dejé en lo suyo mientras Yo trabajaba en mis diseños, más tarde, escuché que Agustín me llamaba, bajé a atenderlo y me pidió poder guardar más protegida cierta herramienta y lo pasé al traspatio, después me pidió permiso de utilizar mi baño, y cuando salió, le ofrecí un refresco nos quedamos platicando por un buen rato, y Yo aprovechaba en cada descuido para mirar su bulto. Así pasamos 3 días relacionando un trato, ...

... conoció mi trabajo, y poco a poco nos llevó la ocasión a tener mayor confianza entré los 2. era un Sábado, me levanté más caliente que siempre, bajé desnudo a la cocina y preparé un café, me senté dando la espalda a la ventana, en verdad nunca vi cuando Agustín pasó por su herramienta, Yo continúe con mi café,después me levanté y me asomé al patio, y descubrí algo que produjo grandes sensaciones en el Culo. Leche, había espermas en el piso del patio, Bueno, No era difícil adivinar qué había pasado. Y esto me súper sobre calentó aún más. Después, ya daban las 10 de la mañana, cuando por la puerta principal entró Agustín, venía con un chico de unos 35 años, le dio algunas cosas y le indicó dónde regresarlas, les ofrecí un café y pasaron, el chico este, Pablo, no dejaba de mirar con atención mis expresiones, me levanté con la curiosidad de ver hacia dónde iría su vista, y Si, su mirada se posó en mis nalgas, al momento pensé qué Agustín le había dicho algo, y me sentí molesto, luego Pablo se retiró y me quedé platicando con Agustín, quien me miraba casi tocando mi cuerpo, saqué una botella de tequila y serví un par de vasos, después la botella se terminó y ya Agustín daba muestra de embriaguez Vi que Pablo guardaba la herramienta y se pasó después con nosotros, durante el resto de la tarde, los vasos iban y venían, y sucedió lo clásico en las borracheras, sale lo peor o lo más gracioso de uno, y los abrazos que nunca faltan. colgados como changos. Ya por la madrugada, decidimos ...