El Venezolano del Gym - Relatos Eróticos

El Venezolano del Gym

Me llamo Jonás y tengo 21 años, se me ve de menos por raza oriental mido 1,72 y peso 70 kilos desde hace poco comencé a ir a este gym ,uno muy bacan.iva casi todos los días durante la mañana, no había pasado nada especial pero yo me sentía un tanto caliente y yo ya estaba terminando mi rutina, cuando veo pasar a un joven que venía recién llegando y pasó cerca mío me miró y sonrió yo le devolví la mirada sonrojado. El tipo era un venezolano exquisito,3 cm más alto que yo, con un cuerpo bien trabajado y culito de una hembra se veía bien bonito redondo y tornadito que me llamo la atención me apuré en ir al camarín para ver si podía conversar con el pata.

agarre mi toalla del loker y al baño de hombres, estaban las duchas y unas bancas al rededor una frente a la otra, y en la otra. Cuando entré, vi al venezolano sentado poniéndose su short y como que se incomodó al ver un desconocido, luego de allí. Yo le trate de hacer la conversación me presente me llamo Jonás y el se llamaba Moisés acaba de llegar al Perú tenía 3 semanas, dejé mi ropa al lado y me saque el polo, arreglando todo lo que iba a necesitar para la ducha me saque el calzoncillo para dejar ver mi pinga de 19cm. El venezolano estaba mirando con una satisfacción, era exquisito este webón y no podía evitar mirarme, aunque lo intentaba disimuladamente.

Mierda, me quedé solo con el veneco por mi parte no podía pararme aún, tenía la pinga erecta y no quería que se de cuenta, mientras que él cada vez de forma más ...

... desinhibida se pasaba mano por su hermoso culo como mostrándomelo. Yo aún impactado y caliente por la situación, aprovechando que estaba cerca de él, y que a pesar del poco tiempo que llevaba ahí aún no se ponía su short, decidí actuar y estire mi mano, y le toque el culo no me podía aguantar luego mirándolo a los ojos, intentando encontrar su mirada cómplice. Y así fue, no me quedo otra lo agarre de la cabeza y una mano, me la empezó a mamar era la mamada, sintiendo como crecía mi pinga crecía en su boca se desbordaba. Mi pinga se veía larga y gruesa muy normal que placer nunca imaginé que en lugar tan vacan como ese gimnasio iba a vivir una de la experiencia más excitante de mi vida.

Cuando me la estaba chupando, le tocaba el culito que estaba al descubierto. Yo me sentía a mil, porque a pesar de que había poca gente en el gym,el miedo a que alguien podía entrar era excitante. Todo pasaba muy rápido, me agarra y me da un beso muy caliente se volvió agachar y sentía los chorros de semen en cualquier momento estaban por salir disparados a su boca y el se tomaba todo sin dejar ninguna gota.

todo pasaba tan rápido y decidí abrir la puerta de una ducha y meterme a ella y lo jale de la cabeza lo pude contra la pared. Sonaba el chorro del agua, se me acercó a mí, le di vuelta y lo empecé a penetrar a comerme el culito bonito llanero. Toda la pasión que había sentido en la boca con su beso, se trasladó ahora ese culo era mío su culo que estaba siendo atacado por un profesional. el ...