Mi mamá y yo - Relatos Eróticos

Mi mamá y yo

... estaba haciendo después de 20 minutos entro a su cuarto y la veo con un pantalón y una blusita que me encantaba verle  pero ella sentada en su cama de espaldas a la puerta como pensativa cosa que me prendió más, llegué y la tome de sus hombros la acaricie un poco acomode su pelo hacia el otro lado y comencé a besarle el cuello cuando me percate que estaba llorando le limpie sus lágrimas y le dije no tengas miedo seguí besándo y oliendo su cuello y ella lloraba le quite su blusita y tome sus tetas las empecé a tocar sobre el brasier ella me dijo PARA! Y yo me fui para estar enfrente de ella empecé a besar y oler sus tetas me sumergí en ambas esto sobre su brasier llegó la hora de acostarla en la cama y quitarle su brasier era un manjar esas tetas caídas y aguadas las tomé las aplaste y comencé a besarlas las mame y ella sollozando gimió así que mordisque esos grandes pezones me divertí un buen rato con sus tetas y ella ya gemia rico y convidado con su llanto de vergüenza era increíble ya la tenía sin brasier y tanga solo para mí terminé de jugar con sus tetas y le ordene que se pusiera en cuatro de forma brusca ella acepto y ahí está yo viendo su culo aguado con una tanguita blanca posarse en cuatro solo para mí, ella se abrío mucho por lo que me permitió ver qué estaba mojada su tanguita le agarre las nalgas como pellizcandolas con toda mi palma y le dije con voz firme si quieres que siga te prometo llegaras al cielo de puros orgasmos pero eso te hará mía mientras le cerraba ...

... sus piernas para apreciar su culo parado mejor metí mi mano entre sus nalgas y masajendo sus labios vaginales le dije si quieres que siga este culo se volverá mío así como tú controlare tu celular y tú vestimenta a mi gusto así que tú decides ella ya caliente por qué le estaba agarrando su colita caliente y mojada me dijo SI SI tú SIGUE pero que sea nuestro secreto, apenas termino de decir eso cuando le meto una buena nalgada que le puso colorado su culo blanco y con mi mano marcada le dije que entonces ahora era mía y de nadie más le empecé a morder las tetas como tanto soñé y le metí un buen chupetón en una la marque como una vaca, le quite su tanguita y con ambas manos le abrí sus nalgas para poder ver ese anito rosita no me aguante y le metí una mamada ella gemia de tanto placer y gritaba DIOS MIO AY DIOS MIO entre gemidos, le estaba gustando sentir mi legua en su anito pues ya estába bien mojado pare y le metí unas buenas nalgadas para dejarle al rojo vivo ese culito o culote mejor dicho, la volteo y le digo ábrete como diario para mí y ella abrí sus piernas y con ambas manos se separó los labios vaginales para dejarme ver su vagina caliente y mojada pero lo primero que ví fue su clítoris era enorme y estaba muy gordo lo toque y lo empecé a jalar como si fuera un pequeño pene ella no paraba de gemir, llorar y gritar, se soltó para agarrarse de su cabecera se estaba retorciendo por qué porfis tenía un orgasmo, apenas puse mi lengua sobre su gordo clítoris cuando se vino ...