Pague caro por mí putería - Relatos Eróticos

Pague caro por mí putería

Holaaa mi nombre es Noreli, soy de Colombia. Mi historia comienza con mi novio en el 2017,  después de una cena con mi novio, paseamos por varias calles. Estaba tan linda la noche, tomados de la mano. Pasamos por un callejón en eso veo de lejos a mi amante, rápido se me subió la inquietud. Mi novio replicó, porque caminaba rápido, le dije que quería ir rápido a casa. No me creyó, seguimos en eso veo que nos pisaba los talones. Creí que iba a quemarme. Volvimos a pelear porque caminaba rápido. Para callarlo lo besé, y no me apartara puse una mano en su verga. Estaba algo erecta, mis manitas ayudaron a que se pusiera más dura. Luego de unos ricos besos, noté que mi amante ya no estaba. Sentí alivio, al llegar a casa me folló bien rico. Tenía ese amante desde hace dos meses, saben soy muy pero muy caliente. Pienso en sexo 24/7 no hay pija que me llene, incluso lo hago con chicas pero nada, soy una máquina de sexo. Eso sí nunca uso condón, me fascina sentir la leche adentro. Varias veces llego tarde en las citas con mi novio por andar de loca. Llego con mi coño de semen o adentro de mi colita jijiji. Al día siguiente pelee con mi amante porque me venía siguiendo, luego del trabajo decidí masturbarme para calmar mi estrés. Estoy en un grupo de Wa, así que me llegó un mensaje de un tipo de El Salvador llamado Bernardo, chateamos al principio era lo típico del cómo estás, qué te gusta, sin embargo pasamos al tema del sexo y ahí  nos calentamos tanto, me decía cosas ricas. Incluso ...

... le mandé foto de mis tetas, él de su pene que si bien es chiquito unos 12cm en ese momento lo quería dentro. Luego de venirnos por cam, me limpiee y me dormí. Al día siguiente con unas amigas nos contamos chismes y salió lo de mi puteria, cuantos manes llevaba en estos meses con mi novio. Hablamos de como me cogian y llenaban mi coño sediento. Nos reímos de nuestras experiencias, incluso del pene de Bernardo a mis amigas les dio mucha risa, una de ellas me dijo porque no dejaba a mi novio y fuera como ella, soltera pero bien caliente. Yo le dije que quería algo seguro, mientras me como otras pijas, luego del almuerzo, regresé al trabajo ahí tropecé con un hombre que cargaba unas cajas, disculpe señorita pase, yo le ayudé con unos papeles que se le habían caído. Pasamos a la bodega, me dió las gracias. El hombre no estaba mal, alto, negro, fuerte. Yo antes ya me había metido con chicos negros  así que sabía lo bien que comería. Él estaba algo nervioso así que para romper el hielo pregunté cosas típicas como su nombre, si estaba casado etc durante la plática no dejaba de desabrocharme la camisa para dejarme ver las tetas o cruzar las piernas. Abajo traía tanguita y bra de encaje color rojo. Después de reírnos porque resultó ser divertido me volví a sentar en eso se rompió una pata de la silla al menos me salvó de caerme. Broméo sobre que ahora dónde me sentaría. No podía estar en las cajas puesto que era material del trabajo, él dijo pues en mis piernas, bromeando estuve unos ...