En la calle - Relatos Eróticos

En la calle

... lo excito mucho porque después de unos instantes con uno de sus dedos empezó a buscar la entrada a mi trasero yo lo deje estaba sintiendo muy rico una vez que lo encontró empezó a meterlo sin mucho esfuerzo pero poco a poco lo metía  y sacaba cada vez entrando mas y mas a fondo, eso me saco mas de un gemido, mientras el hacia lo suyo, yo también hacia lo que me tocaba ya que empecé a mastúrbalo con mas intensidad, con la misma intensidad que él metía su dedo yo se la jalaba, como si siguiéramos el mismo ritmo.
Pablo ya estaba como loco igual que yo, me saco el dedo del ano de una forma brusca que ahí si me dolió, sin perder tiempo me dio la vuelta dándole la espalda a él y me jalo un poco hacia el dando medio paso hacia atrás y me reclino tantico y me dijo que pusiera las manos en el cofre de la camioneta, yo lo obedecí sabiendo lo que seguí, se bajo los pantalones hasta las rodillas y también el bajo los míos, yo ya quería saber que se sentiría tener un miembro de carne dentro, ya sabía lo que era la masturbación anal pero siempre me había excitado el saber que seria tener un miembro dentro de mi y ese era el momento, Pablo coloco su pene como si solo descansara su enorme cabeza de champiñón en mi entrada, lo dejo ahí por unos segundos, cuando empiezo a sentir como lo presionaba hacia mi forzando a que entrara esa enorme cabeza en mi agujero, Pablo empujaba con la cadera y con la mano lo mantenía firme, en ese momento estaba super nerviosa pero super excitada así que hice ...

... lo mío, abrí más mis piernas y empujaba hacia atrás mi culo, hasta que plog, con la fuerza que hicimos los dos, en algún momento tenía que ceder, así que entro de un golpe, me dolió tanto que ya no quería mas así que sin gritar pero con un gran dolor le decía que ya la sacara, pero el no quería, sin moverse me dijo que me relajara mientras me tomaba con fuerza de la cadera, intente relajarme pero el dolor seguía, “Pablo por favor ya sácalo” prácticamente le suplique que me lo sacara pero Pablo comenzó con movimientos leves de cadera mientras yo le decía que se detuviera, Pablo entraba y salía de mi sin sacarla por completo y acelerando poco a poco, el dolor y quejidos fue cambiando a jadeos y a leves pujidos de mi parte mientras sentía como resbalaba dentro de mí, sentía como entraba mas y mas con cada embestida, Pablo es todo un experto por eso hasta el día de hoy reconozco que nadie me ha cogido como él, ya en ritmo la metía hasta el fondo toda hasta que sentía como sus huevos chocaban conmigo y la casaba casi por completo hasta dejar únicamente al borde de mi esfínter su cabeza de champiñón, de esto me di cuenta con el tiempo ya que empecé a sentir cada centímetro de el dentro de mi y justamente cuando estaba a punto de sacármela, nuevamente empujaba, hasta que termino dentro de mí, yo sentí como me llenaba de su leche, sentía como recorría por dentro su rica lechita a lo largo de su miembro sintiendo ese bombeo de su pene engrosándose y presionando las paredes de mi recto ...