El premio - Relatos Eróticos

El premio

... sobar cada pie con mi verga hasta juntar sus dos pies y hacer que me tire una paja con sus bellos píes, estaba en otro mundo, luego abrí sus piernas y lamí nuevamente su vagina hasta dejarla mojada y me puse encima de mi tía, parecía que me iba a coger una niña, empuje ese himen virgen no... ay... me duele, yo estaba lleno de lujuria y sólo quería penetrar a mi Inés por todos lados así que empuje un poco más fuerte y ella soltó un grito agudo y fuerte, había entrado mi glande ay... ay... la bese para que sus gritos no se escucharan y empuje nuevamente sentía como desvirgaba a metía y poco  a poco empezó a penetrar a mi Inés hasta metérsela hasta el fondo ella lloraba, gritaba, me decía que se la saque porque mucho le dolía, pero yo empecé a moverme lentamente al comienzo, pero luego esa hermosa raja se lubrico más y empezamos a coger de lo lindo, ella lloraba y yo la cogía como un demente, que rico era reventarse a cogerse a su tía virgen, la estaba haciendo mi mujer, levante sus piernas de tal manera que mi verga entrara por completo, julio... ay... julio... ya no... yo le metía mi verga y lamia sus pies, hasta que la puse al hombro penetrándola completamente, ay... ay... ahora mi vida entró  todo, para que me sientas para que sepas cuanto te amo, Inés de mi vida, y me vine dentro de ella sin medir las consecuencias, Inés la doy la doy, me vengo, y llene su vagina con mi semen, ella lloraba desconsoladamente, baje sus piernas y con mi verga aún adentro de su vagina la bese ...

... y le dije que nunca la iba a dejar y que ella sería mi mujer, mi esposa porque la amaba, llorando me miro a los ojos y me dijo, Julio ya no eres mi sobrino ay... eres mi marido, si Inesita soy tu marido y te voy a ver siempre, nos besamos y empezamos a coger nuevamente, ella a pesar del dolor se dejaba coger por mi, hasta que le dije Inés quiero hacerte mi mujer por completo, y saque mi verga de su vagina, como ajustaba su concha estaba virgen sonó cuando se lo saque, y la voltee, Inés ponte así, y la puse en cuatro y empecé a lamer ese orificio delicioso hasta poner mi glande en la entrada de su ano, julio por favor, es grande, no te preocupes mi vida te lo voy a hacer despacito, y metí mi glande de un empujón desvirgaba el ano virgen de mi tía ella gritaba y apretaba las sabanas, las mordía para no gritar, y yo se la seguí metiendo, casi se desmaya del dolor, pero yo estaba como un orate, así que puso almohadas debajo de ella y la seguí penetrando hasta que mis huevos chocaban con sus nalgas y empecé a moverme de lo mas lindo, ella reaccionó, julio... me duele mi culo, me lo estas destrozando ay... pero que me importa párteme en dos si quieres pero si eres feliz sigue, y seguí cogiendo a mi amada hasta venirme dentro de su ano, y busque su boca y la bese con pasión loca, había echo realidad mis sueños de hacerla mi mujer, cogimos toda la noche, mi tía había recibido su premio y yo era quien se lo entregaría para siempre, luego comenzamos a vivir como marido y mujer, así que ...