La inauguración - Relatos Eróticos

La inauguración

... hinqué detrás de ella, metí la lengua en su coño, se estremeció, sorbí, recorrí sus coño haciendo que se viniera, me puse de pie, coloqué la verga en la entrada de su culo y empujé, estaba muy estrecho, no lograba entrara, se me ocurrió preguntarle si tenía crema en su bolso, me dijo que sí, jale su bolsa, la abrí y ahí entre varias chucherias había un frasquito con crema.

Tomé crema con dos dedos, unte la entrada de su culo, metí un dedo, luego el otro, su culo se contraía apretando mis dedos, me unté crema en la verga, volví a colocarla en la entrada del culo y empujé, entró un poco y un poco más, ella gimió, me aferré a sus caderas y empujé nuevamente, entró un poco más, su culo apretaba la verga muy rico, varios empellones más hasta que estuvo adentro, sus gemidos eran mas fuertes, mi verga se movía dentro de su culo, empecé a mover hacia atrás y hacía adelante poco a poco, suavemente, quería retardar esa sensación si causarle ningún dolor, poco a poco fui acelerando el ritmo, mis huevos chocaban contra sus nalgas, cuando sentía que iba a venirme me detenía y volvía a empezar, empecé a sudar pero no quería terminar, varias veces repetí la operación hasta que me fue imposible detenerme, sentí que iba a venirme y me abandoné, moví mas fuerte, sus gemidos aumentaron y estallé, me vine dentro de ella fuertemente, empujé varias veces más arrojando todo dentro de ella, empujé varias veces más, finalmente me salí, ella se quedó en esa posición, un hilillo de semen empezó a ...

... escurrir de su culo, se tendió boca abajo en la cama y me tendí a su lado.

Empecé a acariciar su espalda, besé su hombro, acaricié sus nalgas, volteó el rostro y me sonrió, “me gustó”, dijo, “a mi mas”, le respondí, nos besamos, se acomodó en mi pecho y nos quedamos dormidos.

No se cuanto tiempo paso, abrí los ojos, me moví y se despertó “¿qué hora es?”, saqué mi brazo para ver el reloj, “2:35”, le dije, “uuuy, hay que irnos ya”, se levantó, fue al baño, ver su cuerpo caminar hizo renacer mi deseo, mi verga respondió de inmediato, salió del baño, recogió su ropa del piso, me puse de pie, me acerqué, la abracé recargando mi verga contra ella, bajé una mano a su coño jugando con él, metí un dedo, besé su nuca, se dejaba hacer, escuché caer su ropa al piso, tomó mi mano ayudándola a moverse en su coño haciéndola venir, sentí sus jugos resbalar sobre sus muslos, puse una mano en su cintura para que se inclinará, colocó sus manos sobre la silla, le abrí las piernas, puse la verga en la entrada de su culo y empujé, volvió a ofrecer resistencia, empujé más y más fuerte hasta que entró, empezó a gemir, cada vez más fuerte, su culo se apretaba alrededor de mi verga y se salió, me empujó hacia la cama, me dio el frasco de crema, se hincó en el borde y abrió las piernas, unté crema en la el culo y en mi verga volviendo a empezar, nuevamente poco a poco hasta conseguir estar dentro, era una maravilla sentir ese culo estrecho, empujé fuertemente, esta vez empezó a gritar y finalmente ...