Una noche con Dave - I - Relatos Eróticos

Una noche con Dave - I

... ano. D. gime por fin. Mis bolas dan con sus nalgas con cada embate. Los besos son apasionados, la lengua explora su boca, mientras la pija devora su gruta, ya rendida. Besos. – Que culito tan rico, nene …
-	Me estás partiendo el culo, cerdo!
No me inmuto. Ahora paso a ritmo lento, encima de mi pobre víctima. Acelero y embato con fuerza. D. gime y yo bufo del placer de conquistar su estrecho y rico ano.  Le manoseo su verga que se pone tiesa de una sola. Y masajeo sus bolas. El pobre D. gime más continuamente. Me excita invadir su peludo sexo. Al fin tuve que morder su cuello para no gritar cunado me vine en oleadas de leche que inundaron su gruta. Me quedé un rato jadeando hasta desmontarme. Cabrón, me llenaste de leche el culo! – protestó D. No respondí, pues me invadió un dulce sueño por una hora. Y claro, desperté con la verga tiesa, como demandando acción. D. dormía boca abajo. Me incliné sobre el y le abrí las nalgas sintiendo pelos y leche aún. Le besé el culito a lo que D. despertó. – Ah, si eres perverso! Sin inmutarme seguí lamiendo y preparando la verga para otra montada.