1. Cogiendo primera vez a mi cuñadita


    Fecha: 10/10/2020, Categorías: Primera Vez Tus Relatos Autor: Lucho, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... nueva.
    Dicho esto logró soltarse y salió corriendo de la habitación, yo estaba con mi pene hecho una piedra necesitaba eyacular para bajar la hinchazón me quedé acostado en la cama. Pensé que Anita ya no regresaría, sin embargo como a los 10 minutos regresó a la habitación con el pretexto de preguntarme … qué es lo que quería con ella… me miró con mi pene afuera totalmente erecto y  nuevamente la agarre y empezamos de nuevo, la acosté a la fuerza en la cama y esta vez metí dos de mis dedos por el hueco de la licra y esta vez entre en su vagina, ella se resistía y decía que no la rompiera la licra… entonces pedí que se tranquilice y lo hacíamos suavemente a mi insistencia ella abrió las piernas y cerró los ojos.
    Con una mano la agarre fuerte y con la otra guiaba mi pene hacia su vaginita que por lo mojadita que estaba no había necesidad de hacer mucho esfuerzo para meterle la cabeza de mi pene en su rajita, ella dio un salto y dijo… me duele, pero yo la sujete de las manos y no se pudo soltar… solo dijo, “no, eso no, no me la metas” mientras se le iba el aire con muy poca convicción, a lo que solo le contesté: “tu tranquila” que no pasa nada y presionándola hacia abajo le metí la mitad de mi pene rompiendo para siempre su virginidad.
    
    La hermosa Anita , emitió un ruidito como si se tratara de un grito ahogado, me miro con ojos llorosos, pero no dijo ni una palabra y como si no pudiera hacer nada solo se quedó quieta, comencé a moverme despacio hacia arriba y abajo ...
    ... despacio apoyándome con mis piernas en la cama, bastante cansado, pero delicioso, la punta de mi pene se sentía increíble, de verdad quería quedarme ahí dentro de ella para siempre, pero ¿si tener la mitad de mi verga dentro de Anita  era deliciosa, metérsela toda sería el paraíso, evidentemente era  urgente responder esa pregunta, así que cada lenta embestida se la metía un poquito más,  ella más relajada me abrió el camino para penetrarla más profundo, hasta que mi pene se perdió completamente en esa grutita de placer, la resistencia de sus piernitas cedió y Anita cayo completamente penetrada hasta el fondo, sus entrañas quemaban y daban la bienvenida calurosa a todo mi pene, su carita reflejaba una mezcla de dolor, placer e incredulidad, era francamente increíble, lo único que lamentaba era no poder ver la penetración ya que su licra me lo impedía y no podía bajarla porque mis manos estaban ocupadas en sujetar firmemente a Anita, no sea que intentara escapar, ya con toda mi verga ensartada plenamente dentro de Anita reinicie el movimiento de entra-sale lenta pero decididamente, el interior ardiente de mi pequeña cuñadita con su estreches me transportaba al paraíso una y otra vez, su cuevita recién estrenada y por lo tanto realmente estrecha provocaba en mi pene todo tipo de agradables sentimientos, yo movía ese pequeño y delgado cuerpecito a mi antojo, sus senos estaban muy cerca de mi cara, mientras yo seguía moviéndome lentamente dentro de ella. , erróneamente pensé que me los ...