Mi comadre Mati II - Relatos Eróticos

Mi comadre Mati II

... reiniciar lo que habíamos dejado pendiente.

Prendí una lampara, se quitó el saco, nos abrazamos, volví a bajar el zipper, metí la mano para tocar nuevamente esas nalgas y ese coño que en un momento iba a disfrutar, nos besamos con desesperación, se aferró a mi verga por encima del pantalón, mientras mis dedos disfrutaban ya su coño y su culo.

Se desabotonó el pantalón dejándolo caer, la llevé al escritorio, la senté encima de él, le abrí las piernas, me senté en el sillón, hice a un lado la tanga para descubrir su coño y me prendí a él, sorbiendo, mordisqueando, metiendo la lengua, me puso las manos en la cabeza empujándome hacía su concha, se vino en mi rostro con mucha fuerza ahogando un gemido, lenguetee un poco más, me levanté, tomé sus piernas, las alce un poco, se recargó en el escritorio, saqué la verga, se la colocqué en la entrada del coño y empujé, comenzó a entrar sin problemas, estaba totalmente lubricada y excitada, al igual que yo, me aferré a sus caderas y aceleré el ritmo, se vino dos veces antes de que yo lo hiciera, me quedé abrazado a ella dejando salir todo lo que había guardado para ese momento.

Bajó del escritorio, se puso el pantalón, “me voy”, “ah no, tan rápido”, “es que, puede despertar tu mamá”, “claro que no, ella ya no despierta, te lo juro, déjame traer unos tragos y checo si sigue dormida”, “ok, te espero”.  Subí, toqué en el cuarto de mi mamá, no hubo respuesta, bajé, preparé dos tragos y regresé al despacho.

Estaba sentada en el ...

... silloncito, me senté junto a ella, le di su trago, bebimos un poco y regresamos a los abrazos y los besos, no quería desperdiciar la oportunidad de disfrutar de su culo en esa ocasión que podría ser la última, nuevamente bajé el zipper, desabotoné pantalón y se lo fui bajando poco a poco, ella terminó de bajarlo, ahí la tenía sentada, entre mis brazos, bajé una mano hacia su coño, acariciándolo, metiendo un dedo, con el otro jugueteaba en la entrada de su culo hasta que lo metí, lanzó un gemido ahogado, abrió más las piernas, bajó el zipper de mi pantalón y sacó la verga, completamente parada, se subió en mi, colocando la verga en su coño, metiéndosela poco a poco, abrí los botones de la blusa, bajé el bra y empecé a disfrutar de sus pezones de manera alternada, mientras ella se movía arriba y abajo, apretando la verga con sus músculos vaginales, moviendo en semicírculos, disfrutando los dos, aceleró el ritmo y la respiración, apoyó su cabeza en mi hombro y se vino, sentí el temblor de sus piernas en las mías y sus jugos mojarme el pantalón, levantó la cara, me vio, sonrió, mi verga seguía erecta, se movía dentro de ella quien la apretaba con su coño, puse un dedo en su culo y empujé para que entrara, se excitó y empezó a mover más rápido, volvió a apoyarse en mi hombro viniéndose nuevamente.

La dejé recuperar, la tomé de la cintura haciéndole la seña de que se levantara, me paré, la ayudé a hincarse en el sillón, abrió las piernas dejándome admirar enm todo su esplendor el ...