Jugando con mi lengua en su interior - Relatos Eróticos

Jugando con mi lengua en su interior

Mi nombre es Vale, tengo 21 años y siempre me consideré una chica heterosexual pero después de una linda experiencia con mi mejor amiga, descubrí que soy bisexual. Aunque me fue difícil aceptar mi bisexualidad, hoy en día disfruto de ella libremente. Les voy a contar del día en que por primera vez masturbé a mi mejor amiga, antes de eso ya habíamos tenido experiencias entre nosotras, era nuestro pequeño secreto del cual gozábamos inocentemente. Aquél día quedamos en que ella vendría a dormir a mi casa como muchas otras veces. Mi padre fue a recogernos al colegio, llegamos a casa, comimos, vimos películas y vídeos en internet junto con mi familia toda la tarde. Cuando llegó la noche ambas nos despedimos de mi familia y nos fuimos a mi cuarto, en cuanto entramos y cerramos la perra mi mejor amiga (a la que llamaré en mis relatos Pame) me sujetó por la cintura y me beso dulce y apasionadamente. Ansiaba ese momento desde hacía unos días que no había tenido oportunidad de besarla y acariciarla, comenzamos con nuestros besos lentamente pero llenos de pasión para poco a poco irlos aumentando de deseo, mi lengua y la suya jugueteaban inquietas, deseando el roce, la humedad y el calor de la otra, era delicioso, nos tomamos el tiempo para excitarnos y esperar a recostarnos en la cama, nos gusta mucho abrazarnos mientras nuestras piernas entrelazadas y nuestro movimiento de caderas nos brindan un enorme placer sintiendo el roce en nuestras entrepiernas, así nos gusta disfrutar entre ...

... nosotras, hacemos eso mientras nos besamos y acariciamos, pero aquel día ambas deseábamos más, el vaivén de nuestros cuerpos era más rápido, nuestras lenguas se rozaban con más desesperacion y yo apretaba su cuerpo con más fuerza contra el mío, entonces pasó algo que nunca había pasado pero que yo deseaba: empezó a intentar desnudarme, yo me dejé hacer y la ayudé a ella a deslindarse también, me sentía muy excitada, sentía como mi entrepierna cada vez se mojaba más y palpitaba, mientras nos desnudábamos nos besábamos, yo me abalancé hacia sus senos, los cuales a comparación de los míos eran muy grandes, los besé con desesperación, mientras ella trataba de quitarme el sostén para poder acariciar los míos, no me quería despegar de sus senos, con mi boca besaba uno mientras que con mi mano acariciaba y masajeaba su otro pecho, por fin ella dejó de luchar contra mi brassiere y se dejó llevar por la pasión de mis besos, Pame empezó a gemir y estaba agitada, la bese en los labios mientras seguía acariciando sus pechos, pero ella con una de sus manos dirigió una de las mías hasta su entrepierna, quería que la masturbara pero no sabia como hacerlo, nunca había masturbado a nadie más que a mí misma frotando mi clitoris con mi mano o una almohada para alcanzar el climax. Comencé a hacer círculos con mis dedos sobre su clitoris t noté que ya estaba muy mojada, seguí besando sus pechos mientras la masturbaba, cuando poco a poco con mi boca fui besando y lamiendo cada parte de su cuerpo, ...