1. Mi prima y hermana


    Fecha: 02/07/2017, Categorías: Lesbianas Autor: Erde, Fuente: CuentoRelatos

    ... hacia ya unos años, pero ahora se había convertido en una mujer muy hermosa. Pechos pequeños, pezones marrones y puntiagudos, su coño totalmente rapado. Me parece mal decirlo, pero en esos momentos me la quería follar también.
    
    -Ya era hora de que lo hicierais- dijo sonriendo.
    
    Solté la cintura de mi prima y mi mano fue a parar a el vientre de mi hermana. Vi que ella dirigía su vista a mi polla y el coño de ella mientras entraba y salía de mi prima. Mi hermana puso su mano encima de la mía. Pensé que me la quitaría, pero no fue a si. Me la agarro y con suavidad hizo que bajara hasta su coño, aprontando mi maño en el. Lo note muy húmedo. Me excito mucho, tanto que creo que mi polla volvió a crecer más, ya sé que es imposible, pero fue increíble. Luego ella me soltó la mano y con la suya acaricio el clítoris de mi prima mientras yo la follaba. A mí me parecía estar en el paraíso. Después subió al sofá y se puso encima de mi cabeza, dejando su coño al lado de mi boca. Yo ya había soltado a mi prima del todo y ahora mis manos acariciaban el culo de mi hermana, mientras mi boca, mi lengua le lamia el coño. ellas dos se acariciaban los pechos la una a la otra y se besaban con pasión. Mis dedos entraron en el coño de mi hermana mientras mi lengua lamia su clítoris, mi polla entraba con rapidez en el coño de mi prima. Jamás pensé en un trió entre ...
    ... familia.
    
    Note como mi prima se volvía a correr y mi hermana hacia lo mismo por las caricias de mis dedos dentro de ella y mi lengua en su coño. Mi prima se levantó y se saco mi polla, agarrándomela con las dos manos y meneándomela con fuerza, mientras mi hermana bajo su cara hacia ella y con la lengua lamia mi capullo. No tarde nada en sentir un placer extremo, mi semen empezó a esparcirse por la lengua de mi hermana y las manos de mi prima.
    
    Los tres quedemos en el sofá abrazados, desnudos y recobrando fuerzas. Ninguno decía nada, todos sabíamos que eso no era normal, que no estaba bien, pero que nos había encantado.
    
    Al rato salió el compañero de mi hermana despidiendo de nosotros marcho como si fuera normal encontrarnos a los tres desnudos y abrazados en el sofá. Me dijeron que estuviera tranquilo, que era de confianza y que las dos se lo follaban cuando querían, que no diría nada, pues estaba casado.
    
    Los cuatro días que duro mi estancia con ellas volvimos a repetir el trió cada noche. Cuatro días de sexo intenso entre familia.
    
    Mi relación con mi hermana y mi prima es buenisimaaa, las quiero mucho y ellas me quieren a mí. Jamás desde que marche de esos días, jamás hemos sacado el tema y hasta hoy nunca hemos hablado de ello, aún estando a solas con alguna de ellas, nunca sale el tema. Una etapa de nuestras vidas que no me arrepiento y sé que ellas tampoco. 
«123»