Entre vecinos - Relatos Eróticos

Entre vecinos

Hoy había sido un duro día de trabajo para Mónica, caminaba exhausta a su casa, solo quería llegar ducharse y dormir una buena siesta, al llegar abrió como pudo su casa, entró y se fue despojando de todo mientras caminaba a su habitación, al llegar solo estaba en ropa interior, notó que su ventana estaba abierta, ella no recordaba haberla dejado así, al acercarse miro por esta y notó que su sexy vecino se estaba desnudando, el hombre estaba tan bueno que le espantó el sueño y se puso a disfrutar de la vista.

Jhon, un entrenador personal iba a disfrutar de una buena ducha, se estaba desvistiendo al lado de su ventana sin percatarse de esto, él solo quería bañarse, pero en un recorrido con la mirada que le daba a su cuarto, por el rabillo del ojo notó que su exquisita vecina lo estaba viendo y la notaba excitada, él empezó a desvestirse lo mas sexy que pudo.

"por que no permitirle disfrutar de la vista" pensó.

notó que ella estaba solo en una ropa interior de encajes rojos, se veía extremadamente sexy, ella se quitó el sujetador y empezó a tocar sus pechos, acto que hizo ponerlo duro y con la vista mas aún, su miembro dolía y le palpitaba pidiendo liberación que él claramente le daría.

Mónica, dejándose llevar por la excitación siguió tocándose delante de la ventana, ella había notado que Jhon la había visto y también quiso brindarle buena vista, el hombre estaba mas bueno que el pan y lo quería adentro, así que quiso cumplir su capricho con una mentira ...

... piadosa.

Jhon al girarse de nuevo no encontró a Mónica, se encogió de hombros dispuesto a entrar a la ducha cuando el timbre sonó, fue a abrir la puerta y qué sorpresa se llevó, ahí estaba Mónica con una bata de seda que le queda jodida mente sexy, era tan pequeña que deja ver sus largas piernas al descubierto.

- hola Jhon, disculpa la molestia, pero iba a tomar una ducha como podrás ver y no habia agua, no se que habrá pasado, pero me preguntaba si ¿podría hacerlo aquí? - dijo ella con descaro.

Ambos sabían que era una total y vil mentira y el uno sabía que el otro también lo sabía y eso solo lo hacía mas excitante, ambos estaba cachondos y ambos necesitaban una liberación con urgencia.

- oh, claro que no hay problema Mónica, adelante. - Jhon se hizo a un lado dejándola entrar y ver su perfecto culo.

- muchas gracias Jhon, de la que me salvas, por como estas tú también ibas a bañarte. - dijo ella sonriendo con picardía.

- si, no te preocupes, el baño esta allí, duchate tu y luego lo haré yo. - dijo Jhon señalando el baño.

- de ninguna manera, bañate tú primero y luego lo haré yo, esta es tú casa no puedo venir e incomodarte. - dijo ella haciéndose la inocente y cortes.

- en vista que ninguno de los dos sedera, ¿que te parece si nos bañamos juntos?. - preguntó él con descaro.

- me parece una idea excelente - contestó ella complacida.

Así, ambos se encaminaron al baño, al llegar él la arrinconó contra la puerta de este y dejando llevarse por el placer y la ...