A mi también me gusta compartir fotos de mi mujer desnuda 3 - Relatos Eróticos

A mi también me gusta compartir fotos de mi mujer desnuda 3

Hoy quiero compartir con vosotros como fue nuestro tercer trio. Ya llevaba yo rumiando un tiempo que tenía ganas de volver a las andadas pero no había podido contactar ese verano con el masajista que tan buenos servicios había prestado ha mi señora esposa. 
 Así que decidí poner un anuncio en una página de contactos sin que mi esposa supiera nada. La idea era que algún interesado se nos acercará en la playa como en nuestro primer trio. Varios tíos contactaron con migo pues las fotos de mi hembra les gustaron mucho. 
Me decante por un cuarentón alto y delgado con algunas canas. Nos caímos bien y Me prometió que guardaría mi secreto como si el encuentro fuera casual.
El día señalado estábamos mi esposa y yo desnudos en la playa.  El vio nuestras sombrillas que yo le había mandado foto por wasap. Y tras mirarme y yo asentir complice puso su toalla junto a la nuestra.
Se desnudo mostrando un buen físico y una buena polla. Y se tumbó en la arena. Yo invite a mi mujer a bañarnos para que pudiera verla bien de pie en su desnudez.  Al andar sobre la arena el movimiento de sus nalgas desnudas es muy sensual y sus grandes pechos oscilan de un lado a otro sobre todo si corre cosa que provoque con mis bromas. 
En el agua seguíamos jugando resfregando mi polla contra su culo y de vez en cuando le agarraba las tetas y le pelliscaba los pezones.  
Yo miraba donde estaba mi invitado que no perdía detalle de nuestros juegos.
Cuando volvimos a nuestras toallas vi que mi mujer se fijó ...

... en lo bien dotado que estaba nuestro vecino. Mientras nos secabamos el se nos acerco y nos pregunto si éramos del pueblo . Les dijimos que no pero que veraneabamos todos los años. Este año no habíamos cogido hotel porque sólo íbamos a quedarnos un día y dormiriamos en la furgo. El nos dijo que esta de vacaciones una semana y que había ido sólo y no conocía el lugar. Por eso quería preguntarnos si conocíamos algún local que estuviera bien para tomar unas copas. Le dije que conociamos unos cuantos y que nos ofreciamos a enseñarselos. 
La tarde transcurrió muy morbosa conversando y llena de miraditas. El No se cortaba en contemplar los encantos de mi hembra yo de vez en Cuando la acariciaba distraidamente un pezón o deslizaba mi mano por sus nalgas y por su pubis. 
Mi mujer era consiente de que nuestras pollas estaban duras como mástiles y se prestaba al juego de zorra abriendo sus piernas y mostrando su coño de puta caliente. Se ponía crema solar en sus pechos más de lo habitual recreandose en sus pezones. No nos la follamos allí mismo por que había demasiada gente.
Cuando abandonamos la playa el nos ofreció su habitación para que no tuviéramos que utilizar las duchas de la playa. En su cuarto podíamos usar su ducha con agua caliente y luego vestirnos e ir a tomar algo. Mi mujer tenía dudas pero yo acepté en seguida.
  Ella fue la primera en meterse en la ducha mientra nosotros esperábamos le dije a nuestro nuevo amigo que se desnudara y se metiera en la ducha con ella. Me ...