02 Mi primera vez con un can (gay) - Relatos Eróticos

02 Mi primera vez con un can (gay)

Hola de nuevo, este segundo relato también es 100% real, es mi segunda experiencia con un pene ajeno al mío.
Como conté en mi relato anterior, me encanta todo de una mujer, sobre todo sus grandes senos, pero tengo una adicción por los penes, me excita sobremanera la idea de ver un pene flácido y empezar a mamarlo hasta que se venga en mi boca, aunque esto solo ha ocurrido una vez con un amigo.
Esta experiencia ocurrió un año después de mi mayoría de edad, no tenía novia y moría de ganas por tener sexo, frecuentaba la casa de un amigo, él era sexualmente activo con su novia, en una ocasión note que los condones usados los echaba a la bolsa de basura, misma que sacaba todas las noches, cabe mencionar que era basura del día, era “limpia” pues solo tendría botellas de refresco vacías, cajas de cigarro, algún envoltorio de papas que convenientemente era donde depositaba las cenizas de los cigarros y los condones usados.
El día que esto ocurrió, estaba mucho muy excitado, acabábamos de ver una película exótica en la tele y yo moría por tener sexo, lo que fuera posible, cabe mencionar que soy un hombre atractivo, pero en ese tiempo era muy tímido, también pasaba por una mala racha económica así que no me permitía invitar a salir a una chica, mi amigo tenia síntomas de empezar con catarro, así que decidí irme temprano y le ayude sacando la basura.
Fue entonces cuando todo paso por mi mente, al bajar las escaleras, revise de reojo y la bolsa tenia a simple vista, un par de ...

... condones usados, amarrados y podía ver el líquido blanco, espeso… nadie me vio al salir, así que tome una bolsa de basura del vecino, la puse en la canasta de la casa de mi amigo y me lleve la bolsa conmigo, me apure, no quería que nadie notara lo que llevaba, aunque yo sabía que el contenido de la bolsa estaba limpio, la gente podría pensar mal o decirle a mi amigo, cuando me aleje unas calles e iba a mi casa, me detuve en un lote baldío para revisar la bolsa, el pasto estaba muy alto por lo que me ocultaba bien durante la noche, entonces abrí el primer condón, jamás he tenido contacto sexual con mi amigo, pero ese día mi excitación me desinhibió por completo, primero me lleve el condón a mi boca buscando sentir el sabor de la vagina de la novia de mi amigo, aunque no tuve suerte, solo sentí el químico del condón, seguido, bebí el contenido del condón, pudiendo degustar el sabor del semen de mi amigo, una mezcla del mismo químico y su semen, esta vez disfrute dicho sabor, tanto que abrí el segundo condón para repetir la operación, cuando estaba en la gloria de mi perversión, escuche un ruido que me espanto, era un perro de la calle, lo veía frecuentemente rondando por la colonia, varios vecinos lo alimentaban, el, siendo amigable, se acercó a mí, al principio trate de alejarlo, pero inmediatamente note que la capucha de su pene dejaba ver una punta rosada, entonces todos los hilos se conectaron en mi mente, le hable y empecé a acariciarlo, para mi suerte se dejó caer con la panza ...