1. Manoseando a nena retrasada en el circo


    Fecha: 21/11/2017, Categorías: Masturbación Tabú Autor: daimakaichou, Fuente: xHamster

    Hace unas horas fuimos en familia al circo. Era uno de esos circos pequeños que tiene pocas atracciones, pero el recio era muy barato (más que una entrada al cine) así que fuimos. Compramos los boletos en reventa así que al llegar nos formamos directamente. A los pocos minutos comenzamos a avanzar. Nos indicaron las gradas y nos acercamos. Elegimos la parte más baja. En la segunda fila noté una mirada sobre mí: volteé y, efectivamente, una chica me miraba fijamente. Me sonrió. Me llamó la atención que no hubiera nadie sentado cerca de ella ya que pude notar que tenía cierto retraso mental por sus facciones. Me parecía extraño que nadie la acompañara. En fin. Mi familia y yo nos sentamos. A los pocos minutos empezó la función y yo miraba de reojo hacia la chica para ver si algún familiar suyo se acercaba a ella. Pero nada. En mi mente empezaron a brotar ideas sucias y empecé a calentarme, a pesar de ir con la familia (incluida mi esposa). Como no queriendo la cosa y con el pretexto de poder ver mejor, le pedí a mi esposa subir una fila más (exactamente junto a la chica). A ella le pareció bien y subió. En mi mente depravada la finalidad de que ella subiera era que no pudiera voltear hacia atrás y sorprenderme haciendo alguna porquería (jajaja). La chica me sonrió de nuevo y de la nada me dijo que era su cumpleaños.—¡Qué bien!— le dije—Cumplo quince años—añadió con una sonrisa más amplia que la anterior.—Entonces te trajeron al circo para festejar tu cumpleaños— le dije para ...
    ... saber si estaba con alguien. No quería meterme en problemas.—Sí: me trajo mi primo pero él esta con sus amigos del otro lado y me dejó aquí.Agradeciendo la irresponsabilidad del primo, me relajé y sonreí para mí.—Me llamo Paola...—Mucho gusto, Paola— dije, dándole la mano. Mi esposa y yo teníamos una bolsa con palomitas de maíz y ella no. Le ofrecimos y se le iluminó la cara.—¿De veras me dan?—Pero claro.Mi esposa no sospechaba nada de mis negras intenciones con esa muchacha así que sólo prestaba atención a la función. Por un momento la iluminación se hizo muy tenue y para mi sorpresa y fortuna, Paola me preguntó si se podía agarrar de mí, pues la oscuridad le daba miedo. Miré a mi esposa quien aprobó con naturalidad.—Claro que puedes, no te preocupes— le dije, calmándola. Apenas dije eso y ella se colgó de mi brazo. A mi esposa le causó gracia y siguió viendo el espectáculo.Así seguimos unos minutos, sin hacer ningún avance. Me hacía preguntas infantiles y o respondía con monosílabos o moviendo la cabeza.De pronto la luz se hizo tenue de nuevo e intente mi primer avance para ver que tanto podría hacer esa noche: puse discretamente mi mano sobre su pierna y aunque se le quedó mirando a mi mano, ella no la rechazó. por discreción la retiré pero cada que podía la acariciaba en la pierna. En una de las pausas largas con nada de iluminación me lancé a manosear descaradamente la parte posterior de su muslo. Ella no dijo nada y sólo me seguía haciendo preguntas sobre los payasos o ...
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