Mi sueño con mi cuñada, al fin se cumple 4 - Relatos Eróticos

Mi sueño con mi cuñada, al fin se cumple 4

Las pastillas habían funcionando!! Mi esposa había perdido la noción durante casi 8 horas, si consiguiera la manera de dárselas a betty podría tener todo lo que quisiera con ella y nunca se daría cuenta.

Ahora la gran duda, de verdad me iba a a atrever a violar a mi cuñada? Ya me había dado cuenta que ella quería algo pero obviamente no me iba a dejar hacerlo así de simple.

Mi plan era dormirla y probar todo su cuerpecito sin detenimientos, para eso ocuparía el momento ideal y el motivo para darle algo a beber, ya que como habíamos dicho ella no toma, así que después de insistir mucho quedamos de tomar algo cuando llegáramos a casa.

Abrí una botella de vodka con jugo y serví 3 vasos poniendo en dos de ellos media pastilla, después de esto los lleve a la sala y pusimos música, sabía que en mis esposa el efecto tardaría media hora pero en betty tardo solo 20 minutos, en cuanto vi que empezó a cerra los ojos le dije,, mejor ve acuéstate se ve que el alcohol no es lo tuyo!!

Se fue al cuarto y mi esposa inocentemente me dijo que ella no sabia tomar, a lo que le dije que mejor durmamos ya, se recostó y rápidamente igual que la vez anterior se quedó muy dormida. 

Pará asegurar le meti dos dedos en el culo mientras le hablaba y no respondió lo cuale hizo saber que ya estaba perdía, la cobije y espere casi media hora mientras tomaba un poco más, había llegado el momento. 

Fui a mi cuarto donde betty dormía profundamente, lo primero que hice fue moverla, estaba boca ...

... abajo y le di la vuelta, no respondía, traía puesto un short de mi esposa y una blusa de tirantes, la misma que la primera ves, empecé a tocarle sus tetitas sobre la ropa y después su conchita, yo tenía una enorme ereccion, así que le quite el short, debajo tenía unos calconcitos blancos apretados, como dije su culito era pequeño pero levantado así que le di la vuelta y comencé a morderlo, aunque sabía que estaba drogada temía que despertara así que no perdí tiempo y se lo quité, era una delicia ver esas nalguitas rosadas y al abrirlas un apretado ano estaba a mi deleite, le metí la lengua hasta que me sacie, mientras con su mano me frotaba el pito, le besé la espalda y todo su cuerpecito, saque mi teléfono y tome varias fotos.

Le di la vuelta y tenía ante mi una vaginita con muy pocos vellos, rosadita y un poco humeda, quería pensar que estaba sintiendo, prosegui con mi lengua hasta que la deje toda babeada, después de eso me puse encima de ella y puse mi pene en su boca, no quise ahogarla así que no se lo metí en la boca, solamente la tocaba con el, levante la blusa y vi esas enormes tetas que tanto había deseado y las bese, mordí y chupe al cansancio. 

Pase mas de una hora dando una faena a su cuerpo con mi lengua hasta que no pude más y me corrí en su vientre, la limpie y me recosté a su lado, la vestí y antes de irme volví a eyacular pero ahora en su carita, tomé varias fotos de ella con mi semen en la cara y después de limpiarla cerré el cuarto, mi esposa seguía ...