Viajando en bus con la mamá de Carmen 2 - Relatos Eróticos

Viajando en bus con la mamá de Carmen 2

Lo que había sido mi mayor fantasía siempre desde que iba a ver a Carmen a su casa al  fin se hacía realidad sobarle mi verga bien dura en ese culo grande y carnoso de su madre, y eran muchas las veces de que solo imaginarlo en mi dormitorio terminaba masturbandone, pero ahora era verdad y lo mejor que ella lo permitía. 

Así que tocaba aprovechar el momento así que exagere y  puse como pretexto a la gente que me empujaban para pegar mi cuerpo al suyo con más fuerza y así sienta toda la dureza de mi verga bajo mis ropas y si que lo sintió Nelly porque le vi cambiar de color su cara estaba colorada y muy nerviosa. 

Pero cuando vi que sus manos se posaron en las agarraderas de los asientos y la señora se sujeto fuerte y luego tiro para atrás su culazo  era la señal que también lo estaba disfrutando ahora estaba ella en silencio de repente de la vergüenza que un muchacho de 17 años que había sido el enamorado de su hija ahora había logrado excitarla , ahora mis movimientos eran circulares y de vez en cuando empujaba fuerte mi ereccion en su enorme culazo. 

Mi respiración algo agitada y la señora Nelly la sentía muy cerca de su cuello y eso parecía que la calentaba más, tenía ganas de cogerla de  su cintura y jalarla hacia mí con fuerza pero no podía porque era llamar mucho la atención de los demás pasajeros y además tenía una mano ocupada con mis papeles para mi ...

... ingreso a la universidad. 

Ya no pude más y eyacule bastante semen que mojó todo mi pantalón y también un poco de su pantalón de ella, había que pensar rápido así que pegué mis labios a su oído y dije . 

-¡¡. Lo siento mucho señora Nelly no pude evitarlo. perdóneme usted.. ¡¡ 

Ella puso su mano atrás y sintió la humedad en su ropa así que rápido me dijo para bajar del metro y la siga tuvimos que pedir permiso y hasta empujar a la gente para poder bajar yo me cubría con los papeles que llevaba pero ella no podía y se notaba la humedad en su trasero. 

-!!.. Así no podemos estar andando por la calle, y estamos muy lejos de mi casa así que hay que buscar un lugar donde poder limpiarnos.. ¡¡ 

Me hice el tonto y la seguía contento viendo su rico trasero y la mancha que le había dejado en su pantalón y cuando llegamos a un hostal me dijo para entrar algo avergonzada pero no había otro lugar donde podíamos ya limpiar el desastre que había hecho. 

-! Tú no digas nada Alberto dejame a mi hablar y cambia esa cara de tonto que yo también estoy nerviosa pero no tenemos otra solución.. ¡¡ 

Yo estaba sentado en un sofá de la recepción mientras ella hablaba con la recepcionista y luego me hizo la señal para subir la escaleras, no podía creerlo estaba entrando a un hostal con la señora Nelly una mujer de 47 años y no sabía que podía ahora suceder adentro de la habitación.