1. Mi culo desvirgado


    Fecha: 19/11/2017, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... siguiese rompiendo el culo durante toda la noche. Me temo que mis jadeos y suspiros así como las frases que le dedicaba le pusieron más cachondo y volvió a aumentar el ritmo de la ruptura anal, yo ya no cabía de gozo en mí.
    
    YO: Clávamela hasta el fondo.
    
    YO: Esto sí que es bueno.
    
    EL: Tu sí que estas bueno.
    
    YO: Dale más duro.
    
    YO: Muévete más rápido.
    
    Toda esta situación hizo que acelerara su follada, por lo que seguí dedicándole bonitas frases de ánimo, era una delicia sentirse ensartado por aquel trozo de carne que entraba y salía de mí culo a toda velocidad y sin ningún tipo de contemplación, en no más de 5 minutos me dijo:
    
    EL: Me voy a correr.
    
    YO: Córrete en mi boca.
    
    EL: Mejor que no. No te gustaría.
    
    YO: Como quieras.
    
    Finalmente se corrió en mi culo (con el condón puesto) pero en la parte más adentro de mi culo, vamos que ya no le cabía mas polla dentro porque no tenía más que meterme y lo hizo dejándola allí unos segundos, me tenia encalomado por su polla en lo más profundo de mi ser puesto que nadie me había enculado nunca hasta ese día (cosa a la que estoy dispuesto a ponerle remedio por la vía rápida, esto es demasiado bueno como para no repetirlo en más ocasiones). Y de nuevo volví a notar sus pelotas contra mi culo, otra sensación ...
    ... difícil de olvidar por lo agradable que resulta.
    
    Serian las 5 de la madrugada, estuvimos hablando un rato como unos 25 minutos.
    
    YO: Me lo follas otra vez.
    
    EL: Claro.
    
    Esta vez ya sabía lo que me esperara por lo que tras introducirme el dedo le dije que me la clavara hasta el fondo y sin contemplaciones y así lo hizo.
    
    Yo: Clávamela hasta el fondo que ya está abierto.
    
    EL: Hecho.
    
    Fue una gozada, una follada de ritmo trepidante desde el primer momento de la misma, supongo que debido a que yo estaba muy cachondo como una perra y no paraba de decirle guarradas, dame más duro, híncamela hasta el fondo, quiero sentir tus pelotas junto a mi culo, mi culo es tuyo, hazle lo que quieras, híncamela, rómpeme; lindezas de ese estilo.
    
    EL: No te masturbas? Lo vas a flipar.
    
    YO: Vale.
    
    Ya me lo propuso en la primera vez pero no la tenía muy dura, en esta ocasión estaba como una estaca, así que empezó a pajearme a un ritmo brutal. No tarde mucho en correrme sobre mi tripa, de forma muy abundante. Todo esto le debió poner muy cachondo, porque se corrió enseguida. Lástima porque esta segunda follada fue también magnifica pero solo duro 5 minutos.
    
    Si no lo has probado, te estás perdiendo una sensación espectacular. Soy hetero pero desde ese día mi culo es gay. 
«1234»