ROBERTO Y SU NIETA - Relatos Eróticos

ROBERTO Y SU NIETA

Trabajo en una portería, en un edificio de 10 pisos, recién instalaron las cámaras de seguridad y muy pocas personas lo saben, en el último piso vive un veterano viudo llamado Roberto, llego con su nieta de 11 años al edificio y entraron al ascensor, el vestía vaquero y remera azul, la niña una blusa blanca de lunares, un short rojo al cuerpo y chancletas, al entrar al ascensor mire la pantalla y vi como Roberto se recostó en el fondo del ascensor, cuando cerró la puerta su nieta se acercó de espalda pegando su cuerpo al de Roberto y él le puso su mano por debajo de su blusa acariciándole los pechitos, la pequeña niña fue arqueando su cuerpo hacia su abuelo, él se agacho un poco y le metió la mano por atrás tocando su conchita por sobre la ropa, la niña estiro su cabeza hacia atrás y pude observar como gozaba el manoseo de su abuelo, me quede perplejo.
Cuando llegaron al último piso se bajaron y yo quedé mirando el ascensor totalmente vacío, recordando la imagen de esa pequeña niña morruda de colita bien formada, de pelo negro y un broche en su pelo, estuve unos 10 diez minutos así, hice una copia de las imágenes y las guarde en mi celular, llame el ascensor y subí los 10 pisos, me pare frente a la puerta de Don Roberto y estuve unos minutos pensando, golpee la puerta y tras un rato Roberto la abrió, solo tenía puesto un calzoncillo de tela, me miro y me dijo, que precisaba, le dije hablar con usted, sobre que tienes que hablar con migo me dijo, sobre lo que paso en el ...

... ascensor cuando subió con su nieta, el asombrado me dice y que es lo que paso, saque el celular y le mostré el video, el abrió totalmente la puerta y me dijo pasa, hablemos, cuando entre nos dirigimos a la sala y vi a su nieta en la alfombra acostada y solo vestía una bombacito amarilla, solo atine a decir guau que belleza, Roberto me señalo un sillón y me dijo siéntate, quieres tomar algo, no estoy bien le dije, su nieta se sentó en la alfombra y puso sus manitos sobre sus diminutos pechos recién intentando aparecer y quedo observándome, Roberto se sentó en otro de los sillones y mirándome me dijo, lo que vistes en el ascensor es una nena muy cariñosa con su abuelo, ella disfruta siendo cariñosa, me pareció en las imágenes que vi que ella disfruta si, a ella le gusta ser muy cariñosa, dijo Roberto, pero le gusta ser más toda una mujer, mostrale al señor que es lo que más te gusta cariño, ella se levantó, camino hacia su abuelo, se arrodillo frente a el busco su verga dentro del calzoncillo, la saco y empezó a chuparla de forma espectacular, Roberto arqueo su cuerpo hacia atrás tirando su cabeza mientras suspiraba, hay chiquita, la chupas mejor que tu mami, mi verga estaba que reventaba, baje mi cierre, saque mi verga y empecé a pajearme viendo como esa pequeña niña morrudita chupaba la verga de Don Roberto, al rato me hizo señas para que me arrimara, por primera vez acaricie los cabellos de esa niña comiéndole la verga al abuelo, acaricie sus nalgas gorditas y firmes, me agache ...