Ell precio de mi silencio - Relatos Eróticos

Ell precio de mi silencio

... tetas ella se dejaba hacer. 

-! Ohhh.. Moisés  mm... mm.. ¡

Él  aflojó el botón de su pantalón y se lo sacó quedando en su tanga blanca y con su verga dura ya en su mano jugaba con la señora Nelly sobando por todo su culo, a ella se notaba con mucha necesidad así la tuvo unos minutos y luego le dijo que tenía que irse a recoger a otra cliente dejándola toda caliente. 

-! Pero Moisés no te vayas por favor no me dejes así.. ¡

El se subió el pantalón y prometiendo que mañana tendría más tiempo con ella se fue, me escondí para no ser visto cuando salió  a mis 16 años estaba asombrado y al mismo tiempo excitado por lo que había visto tenía la verga que me dolía de lo dura que lo tenía. 

Fue solo unos segundos lo que tenía para decidir que hacer, ella la amiga de mi mamá estába muy caliente al igual que yo, una era que me fuera  y nos quedamos así los dos y otra era entrar a la cocina, con mucho nervios pero más era la calentura entonces hice lo segundo. 

-! Oh.. Toñito..¿ qué haces acá?.. vete por favor de acá..! 

La señora Nelly estaba sentada en la silla solo en tanga estaba hermosa y vi la humedad entre sus piernas y ella también vio mi tremenda ereccion sin necesidad de decirle nada se dio que yo había visto todo. 

-! Por favor Toñito no digas nada de lo que vistes y te doy dinero para que sigas juntando para que compres tu playstation.. ¡

Pero ahora ya no quería nada mas que tocarla así que rápido me saqué la verga dura y se la enseñé y dije que hoy ...

... no se iba a quedar con las ganas. 

-! Pero Toñito tú eres el hijo de mi amiga es mejor que te vayas...¡

-! Bueno solo quería ayudarte, sino quieres entonces si contaré lo que he visto lo que hacías con Moisés.. ¡

Y antes que dijiera nada me acerque a ella y la levantó de la silla, y comencé hacer lo que había dejado a la mitad Moisés, mi verga dura la sobaba por su tremendo trasero, ella se dejaba hacer y solo decia que no siguiera que me detuviera pero nada más. 

           Ahí mismo la lleve a la mesa del comedor y la tire sobre la mesa e hice a un costado su tanga y metí toda mi verga.. ohhh era una sensación nueva para mi, estaba bien caliente y rica su chucha  y comencé a bombear muy lentamente haciendo que la señora Nelly diera gemidos. 

-! Ohhh... Toñitooo... ohhh...mm..mm.¡

Su culazo se veía hermoso así como la tenía apoyada sobre la mesa, sus  grandes de nalgas  saltaban a cada embestida que le  daba ahora con más fuerza, ahora la señora Nelly sólo daba gritos de placer cuando sentía como entraba y salía mi verga de sus entrañas. 

-! Ohhh.. ayyyy.... ayyyy... mm.. mmm.. ¡

Ella me había dicho que su marido la tenía muy descuidada hace tiempo en ese momento no la entendí, ahora si sabía a que se refería porque pedía más verga, ya había olvidado que era el hijo de su mejor amiga solo era una hembra muy necesitaba de sexo. 

-! Siii dame más Toñitooo... ohhh... yaaa... me vengooo... ohhh... ¡

Y luego de llegar a tener un orgasmo quedo inerte ...