Placer prohibido - Relatos Eróticos

Placer prohibido

... de saber que era ella y no otra cualquiera aumentaba en mí el deseo más aún.
-No se qué decir.
-No digas nada Ludmi, te deseo.
Dicho esto la besé de nuevo pero esta vez más salvaje, con prisa, con deseo. La empuje suavemente hacia la pared y me pegué a ella, sus latidos se aceleraron, su pecho subía y bajaba excitado.
Bajé mis manos a sus nalgas y las apreté a ambas, oh dios eran geniales, un culo bien formado y bien firme, apreté sus nalgas otra vez y ella suspiró, le di una nalgada y volví a apretatlas, subí más arriba, la tela de sus shorts era un obstáculo ya entre su cuerpo y mis manos así que pasé las manos delante y busque el botón de su short, lo desbotoné, y bajé el cierre, mientras mi lengua jugaba con la suya, subí hacia sus pechos pasé mis manos por ellos y luego bajé, metí mis manos por debajo de su remera y los toqué, el calor de su piel era increíble, sus pezones estaban durísimos como mi verga, los toqué suavemente y me retiré. Dejé de besarla y procedí a quitarle la remera, dejando sus pechos a la vista, eran dignos de ser admirados, sus aureolas eran rosadas y sus pezones también, sus pechos no eran muy grandes pero eran firmes e increíbles, disfruté de la vista lentamente, me acerqué a ella y le besé su cuello, mientras jalaba su pelo hacia atrás para que su cuello quede más a mí disposición, bajé con mi boca a su clavícula la cual besé y rocé con mis labios haciéndola estremecer,hice lo mismo del otro lado y volví a su esternón, mientras sus manos ...

... tocaban mi cabello, besé el medio de sus pechos, y luego fui por el derecho, comencé pasando mi lengua al rededor de su aureola, haciendo un círculo alrededor de su pezón que estaba esperando su turno, lo hice sin apuro disfrutando del momento tan increíble que estaba viviendo. Rocé su pezón con mi lengua haciendo que se le escape un gemido que tuvo respuesta inmediata con un lenguetazo a su pezón, jugué con él, lo rozaba con mi lengua, lo apretaba con mis dientes suavemente, expiraba sobre de él dejando que el aliento caliente de mi boca lo reconfortará y también soplaba aire para hacerlo estremecer cuando estaba recubierto con mi saliva, procedí a hacer lo mismo con el otro… y acto seguido le dije:
-Vamos a mi habitación, no quiero que nadie nos moleste, ni que nos vean.
-Esta bien.
Pude notar en su voz la excitación, la tomé de la mano y subimos a mi habitación.
Abrí la puerta y la empujé a mi cama, cerré la puerta y le puse traba para que nadie nos moleste, giré y la ví tumbada en mi cama esperando, sabiendo muy bien lo que iba a pasar.
Me acerqué a sus piernas y las besé, recorriendo sus muslos con mis labios, besé el pequeño lugar de piel que llegaba cerca de donde empezaba su short que se hallaba desabotonado y con el cierro abajo dejando ver su ropa interior negra.
Tomé su short y lo baje, dejando a la vista su tanga negra super sensual… se lo saqué lentamente disfrutando mi tacto con sus piernas con cada parte de ella, hasta que lo tiré al lado de la cama.
La miré ...