Cuidando a los abuelos de Johan 4 - Relatos Eróticos

Cuidando a los abuelos de Johan 4

La abuelita de Johan doña Dora ahora estaba totalmente desnuda con las piernas abiertas exhausta sobre el sofá de su sala iuego de experimentar un orgasmo brutal , nuevamente  tenía la verga erecta lista para disfrutar de lo que ella me ofrecía por mi cumpleaños .

Comencé a jugar con dos dedos con ese asterisco marrón que había debajo de su chucha que estaba toda mojada con sus propios fluidos, ella se puso nerviosa al sentir mis dedos en contacto con su ano. 

-!  Noo.. Alberto por ahí no, me va a doler porque nunca lo dejé meterlo a mi marido.. ¡

-! Señora Dora usted misma me dijo que le pidiera lo que quiero por mi cumpleaños y lo que deseo como muchas ansias es su culo.. ¡

Ella recordó lo que había dicho de lo caliente que estaba sin pensarlo, pero igual trato de persuadirme alegando que a su edad ya no estaba para eso. 

-! No se asusté voy a tener mucho cuidado para no hacerle daño, le prometo eso señora Dora.. ¡

Ella confió en mi y se colocó sobre el sofá con su tremendo culazo para mí, le abría las nalgas para seguir con los dedos acariciando su ano cerrado hasta ese momento para el sexo. 

-! Uffff.. Albertito.. uffff... tus dedos ya los siento dentro de mí.. uffff... ¡

Ya tenía dentro de su esfinter dos dedos que entraban y salían a regular intensidad, su culo aún seguía bien apretado y su cara era de un poco de dolor así que busqué su clitorís para masajearlo y se vuelva loca otra vez. 

-! Agg... aggg... despacito.. por favor. ...

... ¡

Sus propios fluidos los usaba como lubricante para ir preparando su culo para ser penetrado por primera vez,  dos cojines del sofá le puse debajo de su vientre para tener todo listo ya, puse mi verga en la entrada de su ano y empujé un poco y se resistió ella dio un pequeño grito.. 

-! Ayyyy... Albertito... ¡

Aumenté ahora la primera embestida en su culo y logré que entrará toda la cabeza del pene, ahí Dora empezó a temblar y se mordió los labios para evitar dar alaridos de dolor tenía el temor de despertar a su marido con sus gritos,  ella ignoraba que don Hugo lo sabía  todo  y a lo lejos sin ser visto ahora observaba como a su mujer por muchos años le iban a romper el culo. 

Otro empuje más y entró la mitad del falo en su esfinter y me quedé quieto unos segundos para que ella se vaya  acostumbrando  al grosor y tamaño de mi verga que le iba abriendo de a pocos a cada centímetro que invadía  su ano, mientras le besaba la mejilla susurrándole que soporte el dolor. 

-! Así.. así.. vas bien aguanta un rato el dolor.. ohhh que ricoooo.. ¡

-! Ayyyy... mee.. dueleee.. ayyy.. pero sigue.. Albertito.. es tú regalo por tu cumpleaños. ayyyy.. metemélo todo ¡

El tercer empujón fue el último que hizo que entrará todo en su culo le agarraba del cabello a la señora Dora mientras la penetracion era más y más profunda,  eran mas rápidas y fuertes las embestidas en su ano que ahorcaba bien delicioso a mi verga. 

-! Aggg.. me está doliendo mucho mi culito.... aggg... ...