Mi hermanito y yo - Relatos Eróticos

Mi hermanito y yo

... mil. Me abrí de piernas y, abriendo bien mi agujero con los dedos, le pedí que me llenara de su pis. Se puso a mil y empezó a mear apuntando a mi agujero y, al cabo de un rato, empezó a penetrarme sin dejar de mear en mi coño. "como el día de la pistola de agua" me dijo "no sabes cuántas veces me he masturbando pensando en eso"
"eres un guarro y me encanta" le dije, gimiendo como una puta mientras me llenaba de su meado y su semen.

Desde entonces, no paramos de follar. Vivimos solos en un piso de estudiantes y hacemos cerdadas a diario. Nos mandamos vídeos masturbandonos con cosas nuestras o en sitios públicos, a veces uno llega a casa y el otro está en su habitación desnudo y masturbandose, ya preparado para hacer obscendiades.

Dios, tengo que parar otra vez para masturbarme... Lo voy a dejar aquí y otro día escribiré más historias, como cuando participó una amiga nuestra o cuando experimentamos con el perrito de una tía nuestra.

Espero que hayáis disfrutado tanto como yo.