1. Mis inicios


    Fecha: 07/10/2019, Categorías: Transexuales Tus Relatos Autor: Cecilia , Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    Hola, mi nombre de nena es Cecilia vivía en la cuidad de Querétaro México, tengo este fetiche de vestirme desde pequeña, usar faldas, blusas, leggins, medias, calcetas y lencería.
    
    Cuando tenía alrededor de 8 años tuve la suerte de que una de mis primas me vistiera de niña, ella y yo estábamos jugando y me comentó que necesitaba a una amiga con quien platicar y, después de eso me dijo que si me vestía con su ropa de la escuela, yo le dije que estaba loca, pero por dentro estaba que me moría por vestir de niña, al cabo de 15 minutos de rogarme le dije que si, me dijo que me fuera al baño y que desvistiera y que ella me llevaría la ropa, me llevo una hermosa falda cableada de color verde, una blusa blanca con detalles en el cuello, un corpiño, una pantaletas rosa y unas mallas blancas lisas típicas escolares...sentía que volaba al sentir esas mallas lisas subir por mis piernas, ya después me puse la blusa y la falda, me veía muy linda, ya que salí, me dijo mi prima que faltaba algo y en eso saco una pequeña peluca que ahí tenía, me la puse y ella me dijo wow!! Te ves muy bonita, te llamaré Cecilia, continuamos jugando y yo en mi mente pensaba en que no se acabara este momento, eras tan bello ...
    ... verme al espejo viéndome tan femenina, desde ese momento creció más mi necesidad de vestirme de niña, cuando llegaba a mi casa y estaba sola, corría por la ropa de mi mamá, me ponía vestidos, blusas, faldas, sus medias, y no dejaba de verme al espejo, me gustaba mucho mi silueta en ese entonces aún no llegaba a la adolescencia y aún seguía más pequeño que ella por eso me quedaba su ropa.
    
    Con el tiempo fui adquiriendo mi propia ropa de mujer, a escondidas fui comprando primero mi lencería que usaba debajo de mi ropa de hombre, solía llevarme mi tanga puesta con un liguero y medias a todos lados, era tan rico sentir ese pequeño hilo dentro de mis nalgas y, cuando llega a mi casa me quitaba mi ropa de hombre dejándome la lencería, me ponía mi brasier y después a vestirme, amaba mucho un vestido blanco que había encontrado en el centro de la ciudad, me lo ponía y para ese entonces ya había comprado algo de maquillaje,  un poco de delineador y labial rojo y obvi una peluca que me llegaba abajo de los hombros, eran tan bellos esos momentos, que después de un tiempo empecé con la fantasía de salir así vestida, pero bueno eso ya se los diré en otro relato, gracias por haber leído el mío, besos!!!
    
    
     
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