Mi tío me hace mujer - Relatos Eróticos

Mi tío me hace mujer

Era una pequeña niña de alrededor de seis años cuándo comenzó mi interés por el sexo, pues mi tío era fan de los cómics y películas pornográficas que vi en más de una ocación.
Un día ya con ocho años cumplidos, solo estábamos mi abuela y yo en casa, u como esta estaba más que dormida y con mis padres en el trabajó y mis hermanas que aún no llegaban de la escuela, ahí me decidí a meterme al cuarto de mi tío a ver sus historietas, luego de un rato leyendo yo ya estaba toda mojadita, pero al poco tiempo mi tío llegó a casa me descubrió viendo sus cosas, al principio él estaba todo nervioso de que encontrará aquéllo ya que mi papá (su hermano) le había dicho en más de una ocasión que tirará todo eso (por eso casi siempre era muy cuidadoso al guardarlos). 
Entonces él todo nervioso me pregunta ¿qué estoy haciendo? Yo igual de nerviosa no pude contestar pues estaba congelada pensándo en la bronca que me iban a hechar, grande fue mi sorpresa cuándo mi tío me dijo que si me gustaba aquéllo, yo con obvia pena solo asenti con la cabeza, entonces el me pregunta "¿qué sientes cuando ves esto?", yo aún tímida contestó "aquí en mi conchita se siente bonito y luego me mojó mucho, cómo si me hubiera hecho pipi" él no dice nada y sólo se me queda viendo "¿no estás molesto conmigo?" le pregunté al ver que no me contestaba, "no, no estoy molestó contigo" me responde acariciando mi cabeza.
Él se levanta y me dice que si me quiero sentir mejor, yo toda avergonzada le digo que si, mi tío se ...

... acerca a la puerta y la cierra con seguro, él rápido se acercó a mí y me comienza a tocar mis piernitas mientras me dice "sólo prometeme que no le dirás a nadie" yo toda inocente le pergunto el por qué a lo que me contesta "sólo quiero que este sea nuestro secreto" yo como le tenía mucho apreció a mi tío le dije que estaba bien, que este sería nuestro secreto, el al oír mi afirmación comienza a besarme el cuello, además de que su mano pasa de mis piernas a mi vagina y me la empieza a acariciar sobre la tela de mis bragas, yo cómo dije antes ya estaba mojadita, así que el me susurra al oído "estas muy mojada, hasta tus calzoncitos estan todos húmedos", yo tímida le contestó "Si es que ese librito me gustó mucho".
Entonces él aprovechando mi comentario toma el libro y comienza a ojearlo y se detiene en una escena dónde están penetrando a la chica y me pregunta que si me gustaría sentirme tan bien cómo ella, yo respondo en un gemido que sí, él me aparta las bragas y comienza a meterme dos de sus dedos, yo que ya había comenzado a masturbarme desde los seis o siete le digo que no quiero sus dedos sino su polla, justo como lo decían las chicas de aquellas historias, por ello el ya todo exitado por mis palabras me quita mis calzoncitos y me sienta sobrea sus piernas y lentamente me comienza a ensartar su pollon (que debo admitir era de casi veinte centímetros y muy muy gorda) yo sentía que me iba a partir a al mitad entonces entré llantos le dije que me dolía que ya no la quería, él ...