1. EL POLVAZO CON LA ABUELA DE MI NOVIA


    Fecha: 27/07/2021, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... a llenar los vasos.
    
    -¿A qué esta buena?
    
    -Perdona que te diga una cosa. Los cosacos, a tu lado, bebiendo, unos chiquillos.
    
    -Estoy intentando emborracharte.
    
    -¿Para qué?
    
    -Para que me quites las ganas que tengo atrasadas. Para follarte y volverte a follar. Hace veinte años que quedé viuda, y veinte años sin probar una polla son muchos años.
    
    -¿Y su nieta?
    
    Se acercó a mí. Se arrodilló. Abrió la cremallera de mi pantalón. Sacó mi polla, y antes de meterla en la boca, me preguntó:
    
    -¿Se lo vas a decir tú?
    
    Me hizo una mamada de maestra. Cuando me iba a correr, le avisé:
    
    -Cuidado que me corro.
    
    Siguió chupando. Me corrí. Saboreó mi leche como si fuese una dulce bebida.
    
    -Deliciosa. Ya no me acordaba como sabía. Ahora nada mejor que un chupito de aguardiente.
    
    ¿Chupito? Se calzó medio vaso.
    
    -La bebes como si fuera agua.
    
    No me contestó. Puso la botella de aguardiente y los vasos en el suelo. Se sentó sobre la mesa, y me dijo:
    
    -Adivina que quiero que me hagas.
    
    -No hacía falta ser adivino. Quería que se la comiera. La besé. Recibió mis besos con sumo agrado. Le quité la blusa blanca y el sujetador azul. Me enontré con unas tetas pequeñas con areolas negras y pezones grandes. Se las comí bien comidas. Luego le quité la falda negra y las bragas blancas. Le pasé la lengua por los labios del coño. Metí la puntita de la lengua dentro, y lanzando un gemido, me dijo:
    
    -¡¡Me corro, cielo, me corro!!
    
    En mi lengua sentí las contracciones de su sexo, ya que la apretaba y la soltaba. Cuando iba a terminar, entre jadeos, me dijo:
    
    -¡Méteme la polla, métemela!
    
    Se la metí, y lo que nunca había visto, ni volveré a ver, ocurrió, nueve veces se corrió en menos de dos minutos-
    
    Cuando acabó, me mandé mi vaso de caña de hierbas de una sentada. La ocasión lo merecí
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