1. MIS PRIMOS ME INICIARON


    Fecha: 19/06/2021, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... distraídos. Unos charlando, otros jugando a las cartas y otros durmiendo la siesta. Yo me baje los pantalones y me acosté boca abajo sobre unos cueros de oveja que tenía mi abuelo creo que para el recado del caballo. Mi primo sacó la pija, la llenó de saliva y me la puso en la puerta. De un solo golpe me metió toda la cabeza. Me hizo doler mucho y le pedí que esperara. Luego de un ratito comenzó un vaivén lento hasta que dio otra estocada y esa vez me metió unos centímetros de esa pija que para ese momento me parecía demasiado grande. Me hizo doler mucho y grite un poquito para no llamar la atención, Espero nuevamente hasta que comenzó el mete y saca. Cuando aceleró el ritmo sabía que estaba por acabar. Mientras sentía como estaba largando sus chorros escuchamos que alguien se acercaba. Le pedía que me lo sacara para vestirnos pero en esa circunstancia lo único que quería era largarme toda la leche dentro de mi culito. Mi corazón bombeaba cada vez más rápido, Los pasos se escuchaban cada vez más cerca. Cuando terminó de largar la leche me la sacó y guardo su pija Yo me subí lo más rápido que pude los pantalones y nos quedamos quietos esperando que en cualquier momento se abriera la puerta. Si nos encontraban ¿que podíamos decir que estábamos haciendo en ese lugar? Luego de un par de minutos no se escucho más nada. Abrimos lentamente la puerta y no se veía nada. Entonces salimos y vimos a mi abuelo que estaba dando de comer a los animales. Había sido él a quien escuchamos ...
    ... cuando estábamos culeando en el galponcito. Esa fue la última vez que lo hicimos. Después de eso un par de veces lo hice con el hermano que era más grande aún de nombre Daniel. En ese momento trabajaba en el campo pero de otro distrito. Como dije antes, mi tía vivía en el campo así que cuando Daniel venia a nuestro pueblo se quedaba en casa. A esa altura yo ya estaba con síndrome de abstinencia y quería pija como fuera, Encima el trabajo rústico del campo le había torneado un hermoso lomo. Así que estaba loco por encontrar el momento para poder insinuarle que me cogiera. Y el momento llego, o quizás lo hice yo. Una noche de invierno que estaba en casa porque era su día de descanso, se largo una fuerte tormenta y hubo corte de luz. Por ese motivo después de cenar todos nos fuimos a dormir. Nos alumbrábamos a vela. Así que una vez que nos habíamos acostado cada uno apago su vela y quedo todo a oscuras. Yo compartía con Daniel mi habitación. La lluvia y la oscuridad me hizo ratonera demasiado. Así que a oscuras me levante y me acerque a su cama y le propuse “Querès que cojamos. Yo me dejo”. La respuesta no se hizo esperar “Estas loco. Nos van escuchar” Yo le busque todos los argumentos posibles pero me hecho, me dijo que me fuera a mi cama y me dejara de boludeces. Yo me acosté pero no podía dormirme. Estaba demasiado caliente. Entonces volví a la carga y le dije que si lo hacíamos con cuidado no teníamos por qué hacer tanto ruido como para que nos escucharan de la otra habitación. ...