1. La señora Sandra


    Fecha: 16/06/2021, Categorías: Incesto Autor: Milfantasy, Fuente: CuentoRelatos

    Siempre me han gustado las mujeres maduras, y todo se debe a la señora Sandra mi primera madura
    
    Esto ocurrió cuando yo tenía 18 años, estudiaba el tercer año de preparatoria y solo pensaba en coger, en ese tiempo aún era virgen y mi calentura me la quitaba a base de pajas fantaseando con maestras y compañeras de clases
    
    La musa y reina de mis pajas era mi vecina la señora Sandra, si supieran cuantas pajas me hice en su honor, ella era una señora chaparra de un 1.60, tendría unos 45 años, era un poco gorda pero muy bien acomodado, se formaba una cinturita terminando en un culo respingón y sobre todo lo que más me llamaba la atención era sus enormes senos, en verdad que eran grandes
    
    Siempre usaba unos leggings color negro y una blusa de tirantes de color rosa, que dejaba ver un tremendo escote, yo aprovechaba para estar cerca de ella mirándola, siguiéndola con la mirada, y fantaseando con verla desuda. Así que siempre terminaba jalándome la verga en su honor
    
    Uno de esos días estando en casa, subí a la azotea a reparar el aire acondicionado, mi casa esta justa atrás de la casa de la señora Sandra, por lo que en la azotea puedo ver la remara de la señora Sandra, siempre esta con las cortinas cerradas y no se puede ver nada
    
    Ese día en espacial estaba haciendo mucho calor, por lo que la señora Sandra tenia abiertas la ventana de su recamara, al principio no vi nada y seguí en mi trabajo de reparar el aire, justo al terminar, noto que la señora Sandra va entrando a ...
    ... su recamara solo con una toalla enredada en su cuerpo, al parecer se había terminado de bañar y se disponía a vestirse
    
    Me quede sin aliento, no podría creer lo que estaba viendo, la señora Sandra se quitó su toalla quedando totalmente desnuda, era la primera vez que veía esas enormes tetas desnudas, tanto tiempo deseándolo y al fin ocurría, mi verga se puso tan dura que hasta dolía en mis pantalones
    
    Me quedé sin hacer ruido, disfrutando el espectáculo, cuando la señora Sandra voltea a verme, de inmediato baje de la azotea y me metí a mi casa, pensé que la señora Sandra le diría mi madre que me regañaría y tendría problemas. Me pase todo el resto de la tarde esperando que me regañaran, pero no ocurrió nada
    
    Durante los siguientes días no volví a la azotea y evitaba a la señora Sandra, hasta que yendo a la tienda de la esquina me encuentro con ella.
    
    —Hola Luis, ¿cómo estás?
    
    Me quedé helado sin saber que decir, solo pude contestar:
    
    —Bien señora Sandra, ¿y usted?
    
    —Muy bien, también,
    
    —Y dime ¿cómo va la escuela?
    
    —Bien estamos en exámenes finales
    
    Seguimos hablando hasta llegar a mi casa, donde se despidió de mí dándome un beso en la mejilla.
    
    —Adiós Luis, y suerte en tus exámenes, no te distraigas—sonriendo.
    
    No sé si fue mi imaginación, pero en esa sonrisa vi que su mirada era como una invitación. Así que esperé un rato que me pareció eterno y con nervios subí a la azotea. Y ya estaba ella ahí en su recamara con la ventaba abierta, desvistiéndose y ...
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