Un trio, muy especial - Relatos Eróticos

Un trio, muy especial

......................... (CONTINUACIÓN DE UN TRIO MUY ESPECIAL)

Son las 11 de la mañana, aun permanezco acostado en mi cuarto. Llevo media hora pensando en lo que ayer viví y aun no puedo creerlo. Años de estar criticando a esas personas que sienten atracción por una persona de su mismo sexo, y hoy soy una de ellas.

No puedo borrar de mi mente el momento en que Lorena apareció con ese chico, de cómo se fueron dando las cosas, el placer que sentí al penetrar el culo de Hugo. Sin embargo, si debo ser sincero, lo que nunca olvidaré es la sensación de sentir el pene de este desconocido en mi boca y mucho menos el sabor de su semen. Si bien es cierto, no me gustó mucho su sabor, tampoco me desagradó tanto, y recordándolo, tengo ganas de hacerlo de nuevo.

Son las 3 de la tarde, y aun sigo pensando en Hugo. Si bien es cierto con Lorena existe cualquier confianza, tal vés de no haber estado ella ahí, las cosas podrían haber sido diferentes y esa duda es la que no me deja tranquilo.

Ya son las 4 y me he masturbado dos veces, recordando la verga de este muchacho. Quiero contactarme con Lorena , para pedir, disimuladamente, algún teléfono o correo donde ubicarlo. Lastima que ella solo se conecte en la noche.

Ya es de noche, mientras visito diferentes paginas internet, espero ansioso que Lorena se conecte.

11 de la noche, de pronto aparece un recuadro indicándome que Lorena se ha conectado. Inmediatamente la contacto y comienzo a chatear con ella.

Primero como ...

... siempre le digo que ella había estado fabulosa, unas palabras por acá y por allá, hasta que ella toca el tema de Hugo

Hugo se incorporó a nuestra ventana. La verdad me dio mucha vergüenza hablar con el ante Lorena, por lo que luego de anotar su dirección, me desconecte del MSN.

Esperé a que Lorena se desconectara, paso mas de una hora y cada vez que entraba, la encontraba a ella. De repente, dentro de mis contactos desapareció Lorena y quedó conectado Hugo.

A través de mi pantalla podía ver como Hugo se bajaba lentamente sus jeans. Nuevamente usaba una tanga de mujer, cosa que de inmediato me excitó mucho. De la misma forma yo me mostré ante el, tratando de que mi verga se viera lo más grande posible dentro de mis slip.

El se daba vueltas y me mostraba aquel culito que el dia de ayer había sido mío. Yo comencé a masturbarme , mientras el se mostraba muy sensual, tirando su ropa interior hacia arriba, obligando a que esta se metiera en su culo.

Le pedí que se sacara la tanga y el lo hizo. El sacaba su lengua y me escribía que le gustaría tener lo que yo tenia en mis manos , pero en su boca.

Le hice darse vuelta y que con sus manos se abriera el culito y que me lo mostrara. Luego le hice meterse un dedo y luego dos dedos en el culo. Yo le escribía todo lo que le haría al otro día cuando lo tuviera en vivo y en directo.

El me dijo que quería verme acabar, y comenzamos a masturbarnos los dos. Llegado un momento, yo le dije que ya estaba listo , y el me dijo que ...