el telefono - Relatos Eróticos

el telefono

... el man la levanta y se pasan al asiento trasero, acomoda el teléfono y la monta de nuevo pero esta vez ella de frente a la cámara, ella misma se introduce el pene mirando picara a la cámara y allí tuve que aguantar venirme al ver como el pene aquel suertudo friccionaba los ricos labios de la nena. Mientras ella cabalgaba el man la tomaba por las caderas y le besaba el cuello. La nena, claramente excitada le toma una mano y la lleva a su vagina diciéndole: papi hazme eso me gusta, y el papá comienza a frotar un muy hinchado clítoris, hasta que la nena volteando los ojos se extreme y grita, los tres nos corrimos al mismo tiempo, el man dentro de ella y yo en mi mano. Ese mismo día decido seguir viendo, los 4 siguientes videos eran cortos y sólo jugaban que si a tocarse disimuladamente viendo tv, en un centro comercial y en la camioneta. A todas estas siempre había tenido el teléfono en modo avión, hasta que por curiosidad conectó el wifi y de inmediato llegan notificaciones de whatsapp, telegram y otras apps. No podía leer nada porque estaba instalado un bloqueador de apps, y debido a eso mi curiosidad me llevó a quitar el modo avión no sin antes instalar un script que anulaba toda posibilidad de ubicación por GPS. Al menos desactive el modo avión llegaron docenas de notificaciones tanto de llamadas perdidas como mensajes de texto. Me dispuse a leer los mensajes, nada relevante, sólo me llamó la atención un numero que repetidamente pedía recibir "la merca" y pues imagine que ...

... se refería a drogas. Acompañado de una botella de sangría, un porro y cigarrillos me dispuse a revisar tranquilamente la carpeta de fotos, eran muchas, el man se había dedicado a hacer sesiones de su hermosa hija en distintos contextos, vestida de hada (O mejor dicho semivestida) con ropa interior sexy, en posiciones sexuales, etc. Estaba disfrutando mucho de aquellas fotos cuando de pronto se activa una llama de un número registrado como "casa". Luego de titubear unos segundos respondo sólo con un "sí, diga" y del otro lado una voz con un tono receloso pero decidida me dice que tengo un teléfono de su propiedad y me ofrece una recompensa por recuperarlo, en la misma tónica le respondo que lo encontré en el metro y que no me interesa el dinero. Luego de una pausa y en tono más flexible me dice que es de suma importancia recuperarlo ya que le urge el contenido y números importantes guardados. Involuntariamente suelto una leve risa y le digo que si necesita los números o los videos de su nena, inmediatamente cuelga y yo pues sigo con la sangría y fotos. A los 30 minutos aprox. llaman de nuevo, y ahora con voz algo nerviosa me dice que como hice para ver los archivos y que negociemos, le respondo qué me ofrece y su respuesta me dejó atónito: te gustaría ver en vivo? de inmediato me adelanto y le digo que no es suficiente, con firmeza me dice que a su nena nadie la toca, entonces no hay nada que hablar y cuelgo. Allí me domina la idea de poder tener entre mis brazos a esa hermosa ...