Otro encuentro con mi vecino - Relatos Eróticos

Otro encuentro con mi vecino

... Empecé a acariciar su espalda con mi otra mano y lo acosté boca arriba poniendome yo encima de él. Seguimos besandonos y el seguía acariciando mi verga y mis bolas mientras yo le acariciaba la cara, sus orejas, su cabello, su cuello. Me agaché un pocó y sentí como su verga me rozó mu agujero del culo y me prendí más. Intencionalmente me dejé caer un poco más sobre él y mientras nos besabamos sentía como su verga rozaba más y más mis nalgas y mu agujerito. Seguimos así unos minutos más hasta que me dijo "dejame seguir saboreando tu verga antes de que claves". Yo me recosté boca arriba mientras mi veci se pusó sobre mi y bajó su cabeza hasta mi verga. Se la metió toda en la boca mientras yo sujetaba su cabeza y yo se la acariciaba mientras pasaba mi mano por su cabello corto y lo hacía tragarsela toda. Siguió así unos minutos y se turnaba lamiendo mis bolas. Se las metía al tiempo en su boca y me hacía lanzar gemidos. Nuevamente estaba en el paraiso. Le dije "te quiero penetrar ya" y el sólo sonrió. Se levantó y abrió su mesa de noche, sacó un condón y me lo pasó. Yo me lo pusé mientras el se aplicó lubricante en su agujerito. Seguía boca abajo mientras mi veci se subió sobre mi y puso su culito sobre mi verga mientras ...

... empezaba a rozarlo y lentamente empezó a entrar la cabeza. Sentía ese calor y como su culito iba abriendo y dando paso a que mi verga tomara su lugar. Seguí lentamente metiendoselo y el empezó a gemir entre dolor y placer y le pregunté si le estaba doliendo. El me dijo que si pero que siguiera metiendolo hasta el fondo. Ya en el fondo del culo de mi veci, lo empecé a mover más rápido mientras lo abrasaba y mientras aumentaba el ritmo de la clavada nos cogimos las manos y nos veiamos esas claras de placer hasta que no pude aguantar más y lo trajé a mi con mis brazos y mientras nos volviamos a besar aumente el rimto y el gemía más y mas. La cama estaba moviendose pero no sonaba (menos mal jaja, ya era muy tarde) y seguiamos besandonos y yo apretando y acariciando su espalda mientras el se movia bien rico y estaba a mi merced sintiendo toda mi verga como entraba y salía más y más rápido por su culito. Me vine primero y luego se vino el. Se paro y fue por papel higuienico y nos limpiamos. Después quedamos en la cama abrazados mientras yo miraba al techo y tomaba aire de esa segunda cogida que le había pegado a mi veci moreno y flaco. Espero les haya gustado y pronto escribiré la continuación de mis encuentros con mi vecino.