Edificio hot I - Relatos Eróticos

Edificio hot I

... aire libre, estaba dura. Se puso de seguro más dura al saber que estaría con dos chicas. Rápidamente me puso de cuatro y mientras me tocaba masturbar a Rikki, el comenzó a darme duro por detrás. Estuvimos así por un tiempo hasta que se vino dentro de mi coñito, después entre las dos volvimos a chupar su polla, hasta que estuvo duro. Rikki no es mucho de gustarle las pollas por lo que nos puso a las dos en cuatro y nos dio a cada por turno hasta que se sacó y gruñe en voz alta cuando me estaba follando, se corre en mi interior.

Después de esa experiencia con Rikki y Dan. El sexo con los dos siguió pasando. Rikki seguía teniendo sexo con otros chico o chicas, pero en cambio yo era amante de Dan.

Estaba llegando a mi departamento, cuando estaba buscando mis llaves frente a la puerta. Escucho unos gemidos. Genial, mi compañera de piso está teniendo sexo.

Abro la puerta y la muy descarada está con Dan. Ambos estaban desnudos.

—Haley, no te esperaba —dijo Rikki mientras seguía chupándole la polla, ambos estaban desnudos. —¿Qué tal un trio?

No respondí solo dejé mi bolso en la mesita de noche, me comencé a quitar la ropa y cuando estaba desnuda besé a su padrastro en la boca —Quédate linda, me encanta tus tetas —Me quedé de rodilla sobre el sofá, el ...

... sentado en el sofá con las piernas abierta, su hijastra le estaba chupando la polla. Comenzó chuparme las tetas, mientras unas de sus manos traviesas comenzaban a estimular mi coño.

Cuando estuve lo suficiente húmeda y su polla erecta, hizo, que me sentara sobre su polla. Mi compañera de piso se puso un arnés y me dio por detrás sin antes ponerme lubricante, antes lo habíamos hecho.

Padrastro como hijastra me dieron duro por mis dos huecos hasta, que llegamos al orgasmo juntos. Mientras nos recuperábamos, mi compañera de piso dijo —Te dejo en buenas manos, tengo que irme.

Ella se fue y yo me reí —Vamos a mi cuarto, tengo muchas ganas.

Él se río, tome mi ropa y bolso. Nos fuimos a mi cuarto, cerré la puerta. Nos metidos a mi cama —Eres una de mis inquilinas más sexy —me dijo mientras comenzaba a masajear mis pechos. Y volvió a chupar mis pechos, estaba encima de mí, su polla se ponía dura nuevamente.

Tomó su polla con una mano y la guio a mi coño, cuando entró comenzó a follarme. El tipo era bueno en la cama.

Aun no me creo que este viviendo en un harem. Apostaría que se folla a todas las chicas del lugar y sé que con el tiempo lo sabré como también su curioso método para captar chicas que estén dispuestas a tener sexo con él.

Es otra historia.