1. Una apuesta por siete polvos mágicos


    Fecha: 05/04/2021, Categorías: Sexo con Maduras Hardcore, Tabú Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    ... cabeza, rogando que saliera cara… y por supuesto, eso fue lo que salió.Mariano sonrió satisfecho y yo lo miré con cara compungida, mezcla de pobrecita yo, putita asustada y esposa entregada…Apenas subimos a su auto, Mariano comenzó a sacarse las ganas que me tenía hacía rato. Me acarició los muslos, tratando de meter su mano por debajo de mi falda. Yo tenía las piernas cruzadas; pero el tipo me tocó tan expertamente, que se abrieron solas…Sentía sus dedos recorriendo los pliegues de mi tanga.Apenas entramos a la habitación, nos quitamos la ropa directamente. Mariano me había prometido sexo; solamente eso, sin cariño, ni amor, ni otras pavadas.Mariano se acercó con su slip todavía puesto. Se adivinaba algo grande allí adentro. Alargué mi mano a ese bulto que asomaba y me atreví a sacar a la luz una verga bastante larga y gruesa.Le dije que la tenía muy, muy grande y que ese detalle no me lo había contado antes de lanzar la moneda al aire. Pero él sólo se rió y me empujó por los hombros hasta hacerme poner de rodillas.Metí todo lo que pude su verga en mi boca, hasta casi ahogarme. A pesar de todo, le pude dar una buena mamada.Después me lanzó boca arriba sobre la cama, me separó los muslos y me regaló una experta chupada de concha; agregando enseguida sus dedos.El muy hijo de puta me robó el primer orgasmo en menos de dos minutos. Me subí sobre él y, a pesar de mi lubricación, sentí un leve dolor cuando me metí esa verga en mi hambrienta concha.Comencé a gemir mientras ...
    ... cabalgaba esa magnífica pija y esta vez acabamos juntos.Mariano me pidió un tiempo para reponerse; así que a los quince minutos comencé otra vez a acariciarle la verga entre mis dedos.Esta vez se zambulló entre mis muslos abiertos y me penetró muy despacio; para que no me doliera tanto. Sentí su bombeo bastante violento pero rítmico; que otra vez me hizo acabar en menos de cinco minutos y anunció que ya íbamos por la tercera acabada.Sin perder tiempo ni la erección, me hizo poner en cuatro y nuevamente me penetró con todo. Su pija llegó al fondo de mi entregada concha y comenzó a bombearme como loco. Me sostuvo por los brazos mientras me embestía con furia; me agarró por los cabellos y me susurró al oído que yo era muy puta.Todo duró poco; pero sirvió para que ambos acabáramos al mismo tiempo. Mi cuarto orgasmo y su segundo polvo…A esa altura, comprobé que Mariano era una verdadera máquina de coger. No se cansaba de bombearme y eso me calentaba…Luego de esa intensa cogida de perrito, ambos nos quedamos recostados en silencio; acariciándonos con suavidad.Diez minutos más tarde, otra vez esa verga tremenda estaba otra vez lista para continuar la funciónMe pidió que me pusiera en cuatro otra vez y, aferrándome por mis caderas, comenzó a jugar con la punta de su prodigiosa pija.Hundía solo la cabeza entre mis labios vaginales y la volvía a sacar. La deslizaba por toda mi raja y hacía presión en mi estrecha entrada anal. Hizo varias veces lo mismo; siempre intentando metérmela por el ...