1. Descubriendo el fuego


    Fecha: 19/03/2021, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    Mi nombre es Laura, tengo 29 años y quería compartir este relato con ustedes. Les cuento que soy casada, tengo un niño de 3 años y mi esposo Manuel que tiene mi misma edad trabaja en una empresa de comercio exterior en Buenos Aires. Nuestra relación siempre fue buena y afectuosa, nos queremos mucho y nos hemos esforzado para construir un hogar y una familia. Pero lamentablemente el siempre fue muy convencional, especialmente en el tema sexual y yo siempre fui muy curiosa y esperaba que luego del casamiento mi vida intima lleve una dinámica más activa o sea incursionar en cosas nuevas, emprender desafíos y adquirir nuevas experiencias, cosa que no pude concretar por la pasividad de mi esposo. Al tiempo de tener nuestro hijo nuestra felicidad era intensa pero en mi intimidad sentía un vacio enorme que no podía completarlo. En ese entonces fue que en una reunión de fin de año en la empresa que trabaja mi esposo Manuel, entre otra personas, conocí a Luis, un tipo que en ese entonces tenía 50 años. Me cayó muy bien y veía en el un cierto atractivo que se fue potenciando con el tiempo ya que a través de las redes sociales posteriormente al evento nos contactamos. Así comenzó una relación de buena onda y amistad, intercambiamos teléfonos y sin que mi esposo supiera manteníamos un contacto permanente que se fortaleció con el tiempo y nos hizo entrar en confianza. A mi me generaba cierto estupor mantener contacto con un hombre sin que mi esposo lo supiera, más aún cuando empezamos a ...
    ... charlar sobre sexo, fantasías y deseos. Hasta ese entonces era todo charla y bromas peo en verdad cada vez que hablaba con Luis no podía evitar excitarme, más aún cuando me confesó que era un fanático de la ropa interior femenina. De manera atrevida comencé a enviarle fotos de mi ropa interior, luego me animé y empecé a enviarle fotos mías en ropa interior. El asunto se me estaba yendo de las manos ya que en una ocasión me pidió una de mis tangas y se la hice llegar. Luego me manda un video donde aparece masturbándose sobre mi prenda íntima y derramando en ella una cantidad de semen impresionante, pero más allá de eso me llamó la atención su miembro, era enorme y grueso, son unas bolas gigantes. No pude evitar humedecerme al ver esa pija venosa, muy grande y palpitante, curvada hacia arriba y dejando caer chorros de un esperma abundante. Sabía que no había marcha atrás y poco a poco fuimos coordinando un encuentro hasta que se dio la oportunidad y lo invite a mi casa, hacía meses de ese encuentro personal pero nuestra comunicación era tan activa que no me sentía incomoda al volver a verlo. Para ese encuentro me preparé muy sugerente, un vestido que compré para la ocasión, corto de color lila, muy pegado al cuerpo y me puse mis mejores cremas para la piel y un perfume muy dulce. Nuestro primer contacto fue visual, nos repasamos mutuamente y seguido a ello nos fundimos en un beso. Su gruesa lengua chocaba con la mía y exploraba mi boca. Nos deseábamos mucho. No charlamos casi ...
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