UN DESEO IRRESISTIBLE 02 - Relatos Eróticos

UN DESEO IRRESISTIBLE 02

... suavemente, delicadamente, dulcemente, con aquel calor que solo un beso lleno de pasión puede provocar, los labios de Verónica respondieron al beso y atrajo aún más el cuerpo de Angélica, sus bocas se fundieron y la pasión encendió su sangre, luego de unos minutos que para ambas fue una eternidad, sus labios se separaron y tomaron aire.

- Salgamos de aquí – propuso Verónica.

Como pudieron entre choques y empujones encontraron la salida, Angélica miro a Verónica y ésta lucia un hermoso color carmesí en su rostro, caminaron abrazadas por las calles desiertas.

- Ya no aguanto más.

- Que te pasa?, te sientes mal?.

- Es que ha pasado mucho tiempo de la última vez que te bese y no aguanto más.

Verónica le sonrió y la besó nuevamente.

- Mejor?

- Algo si – de nuevo le besó esta vez con la punta de su lengua rozó sus labios y suavemente los mordió.

- Dios!! Que manera de besar.

- Así no llegaremos nunca.

- Vamos entonces.

Emprendieron la caminata, pero en un par de cuadras, nuevamente Angélica arrincono a Verónica y la besó apasionadamente, no quería que esos magníficos labios se separaran de ella. Al rato llegaron a su casa, fueron directamente a su cuarto, sin prender la luz, Angélica besó y acaricio el rostro de Verónica, beso su cuello sus oídos, sus parpados, sus labios, Verónica los abrió y recibió la lengua ansiosa de querer explorar aquella cavidad, degustando de ella, sus manos comenzaron a desabrochar lentamente la blusa de Angélica, asta ...

... dejar expuestos sus senos, solo protegidos por su brasier, Verónica los contemplo y…. y….y no supo que hacer…. De pronto su mente comprendió que estaba apunto de hacer el amor con una mujer y ella no tenía la menor idea de que hacer, su cuerpo se congelo sin saber por donde empezar, Angélica se desconcertó al ver la reacción de Verónica.

- Creo que esto no ha sido una buena idea – dijo al tiempo que se separaba de ella

- NO!, NO, TE VALLAS! - grito Verónica aferrándose a su cuerpo – No es lo que piensas…. Solo… que… yo.

- Verónica, mírame, mírame por favor – Verónica hizo lo que le pedía – te amo, te amo como nunca he amado a una mujer, me enamore de ti desde que apareciste por primera vez en esta playa, tu me cautivaste, pero tenia miedo a que me rechazaras, y lo único que deseo es hacerte el amor, demostrarte cuanto amor hay en mi corazón, no quiero tener sexo contigo, no deseo tu cuerpo, deseo tu corazón, déjame expresarte que mi amor es puro y sincero. Pero si no quieres lo comprenderé.

- Hazme tuya – musito a su oído, y aquellas palabras encendieron la hoguera que había dentro de su cuerpo – te amo Angélica y quiero ser tuya esta noche y muchas noches mas.

Angélica la beso apasionadamente, sus manos exploraban su cuerpo, su espalda, sus senos, los acariciaba los masajeaba, desabrocho su blusa y los beso por encima del brasier, Verónica sintió un escalofrió recorrer su espalda, y su respiración se aceleró, Angélica la voltio, su espalda apretaba los senos ...