1. Las violaciones de mi vida parte 4


    Fecha: 08/02/2021, Categorías: Confesiones Autor: nena2221, Fuente: RelatosEróticos

    ... había atrevido, vestirme de mujer y salir así al mundo, me daba mucho miedo pero no se me ocurría ninguna otra forma de lograr despertar el interés de algún semental que quisiera violarme. No cogerme, no, eso era fácil, quería que me violaran, que me tomaran por la fuerza y me introdujeran un pene duro con violencia y saña sin compasión sin importarle en nada a mi atacante mis sentimientos, como si fuera yo la más despreciable de las putas.
    
    Me fui de compras, compre una minifalda escocesa roja, una sudadera blanca universitaria, me compre unos zapatos negros de tacón alto de 12 cm con plataforma, me depile todo el cuerpo, fue un ritual que duró 3 días todo debía ser perfecto. Al final el resultado fue asombroso, me veía realmente hermosa, cuide todos los detalles, ropa, peluca, zapatos, perfume todo, parecía una putita inocente, así pues tome valor y a las 10 de la noche de ese 16 de junio de 1994 salí vestida de nena de mi departamento, subí rápidamente a mi auto con el bolso en el hombro y comencé a conducir.
    
    Vague por la ciudad sin éxito alguno, pero no me daría por vencida tan fácilmente, a eso de las 4 de la mañana ya de regreso a casa vi en una calle a un chico como de unos 26 años borracho sentado en la banqueta, me detuve, conduje hasta el baje del auto y me senté a su lado, pero había algo que no había practicado “LA VOZ” así que sin decirle nada lo abrace, el me miro y me dio un beso riquísimo, después me agache y desabroche sus pantalones, le di una mamada ...
    ... riquísima y después el acostado en la banqueta boca arriba, me senté en su verga dura, este borrachin se corrió casi de inmediato. Me acomode las bragas subí a mi auto y me fui a casa a dormir. No había funcionado, otra noche sin violación. Seguí este ritual un par de semanas pero sin éxito incluso ya sin borrachos de oportunidad, hasta que entendí algo, a bordo de mi auto nadie podía verme ni olerme, así seguía siendo una putita escondida en casa. Decidí que la semana siguiente sería distinto.
    
    Al llegar el viernes por la noche me vestí con mi atuendo de putita colegiala y Salí al rumbo de Naucalpan, conduje un rato sin novedad, ya comenzaba a decepcionarme y me detuve en un minisúper OXXO que se encuentra en las inmediaciones del toreo para comprar un café, entre a la tienda compre mi café y en lugar de subirme a mi auto caminé unos metros en dirección al periférico, sobre el periférico casi frente al toreo me detuve mientras pensaba en que estaba haciendo mal, sin saber cómo cambiaria mi suerte en los próximos minutos, estaba a punto de vivir el mejor fin de semana de toda mi vida.
    
    Un auto se detuvo junto a mi y eran dos adolecentes de unos 17 o 18 años y el copiloto bajo la ventanilla y me dijo ¿Cuánto cobras mi amor? Me sentí ofendida pero reaccione rápido y le conteste, no te alcanza, se rieron y se marcharon, pero se acababa de abrir un mundo frente a mis ojos, ahí parado a las 12 o una de la mañana comencé a practicar una voz afeminada y decidí que cobraría 300 ...