masaje milagros es el de mi hijo - Relatos Eróticos

masaje milagros es el de mi hijo

... en casa. A los 30 me divorcio y el pendejo huyo asustado no fuese que lo quisiese casar. Con el vivimos verdaderas orgias pues muchos encuentros eran con varias parejas amigas, además hemos hecho todo lo imaginable entre los dos. Resumiendo, la pase bomba pero mi gran orgasmo nunca llego. Entre varias aventuras donde alterné con chicas y travas, me vuelvo a enamorar de un giganton, 1,95, 110 kilos y una herramienta acorde a ese fisico, chicas algo envidiable, si la veian la adoptaban con total ternura y cariño. A los 31 nos casamos enamoradísimos y embarazadísima, ya era mi costumbre, cierto?. Hoy ese suculento polvo ya cumplió 11 años, un hombrecito que promete ser un padrillo como su progenitor. Con el además tuve un desgarro de esfínter del que me operaron y quede bastante bien, chicas, con cuidado por el orto, fue dolorosísimo. Con todo ello mi gran orgasmo tampoco apareció. Cuando envejecemos nos ponemos muy hincha pelotas y el con cinco años menos que yo y una pija de 23 por 8, se cansó y me cambio por otra mas pendeja, mas chiquita que yo, pobre debería ser toda agujero porque comerse a tal ejemplar con ese cuerpecito era una hazaña. Bueno yo también debo tener lo mio. Soy flaca, buen físico, tez morena, pelo castaño corto, mido 1,60, peso 49 kilos, tetas chicas y culo bien redondito y paradito como el de las africanas, ojete reconstruido capaz de las mas osadas hazañas. Lo que me gusta mas de mi son mis pezones, tengo desde siempre areolas pequeñas, y la costumbre de ...

... estirármelos, cosa que ahora son dos conos gorditos con un cilindro en la punta de un cm de largo y 4 mm de diámetro. Si los viesen chicas, me los comerían. Mis tetas son medianas por eso todavía firmes y cuando me chupan el pezón se estira pareciendo que llegase a desprenderse, un encanto, los adoro. Cuando me mamaban mis hijos se inflaban un poco, no mucho, para luego volver al estado actual y de siempre, creo que a los 15 ya eran asi, no recuerdo bien el tamaño de la taza que usaba. Mi concha, bueno a los tres los tuve de forma natural sumando a la poronga de mi ultimo marido, por lo que puedo asegurar que no es pequeña, bien coloradita con labios colgantes según me posiciono, sino casi no aparecen y un clítoris que permanece oculto por pequeño y vergonzoso. A pesar de mi anorgasmia, me mojo bien de calentura y durante la cogida mantengo buena lubricación. La cosa que a los 38 de nuevo estoy soltera en busca de un próximo príncipe azul o del color que sea. Claro soltera con un pendejo de 7, ya que los otros ya estan mas afuera que conmigo, no es buen partido para ningún macho, aun siendo despampanante cosa que no ocurrirá ni ocurrió nunca. Pero los milagros se dan y se me dió. En mi nueva soltería encuentro casualmente a una amiga de casi toda la vida, que de jóvenes habíamos tenido algunos encuentros intimos sin consecuencias, con alegría me confiesa que estuvo muy enamorada de mi, pero yo buscaba hombres y a ella la aburrían. Le pregunto, eres lesbiana entonces, no por ...