1. Mi hermana Julia - 5 -


    Fecha: 14/01/2021, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... puestas aquellas braguitas rojas tan bonitas en las que tantísimas veces me había corrido sobre su tela. - ¿Puedes empezar a hacerte ya una idea de lo cortada que es tu hermana? Vamos, tío: contesta. Ni siquiera le quise responder… agarré el pequeño asiento tipo “puff” que había en una esquina de su habitación, lo acerqué a la cama, me senté sobre él, me bajé yo también los pantalones y los calzoncillos y dejé al aire mi polla, que ya estaba en todo su flamante esplendor. - Vaya, vaya… Apareció tu vena exhibicionista, Luisito. ¿Piensas hacerte una paja aquí? Dime ¿Serás capaz de cometer una desfachatez como esa? ¿O es que quieres impresionarme, chaval? - Puedes apostarte algo… si te atreves; por ejemplo: una buena follada, pero de verdad; -dije muy altanero-, mientras me sentaba y agarraba bien mi verga con la mano. - Eso no te lo crees ni borracho, Luisito. Bueno; tú verás lo que haces. Espera: vas a necesitar algo con qué limpiarte, si es que te vas a hacer una paja. Y me lanzó las bragas que yo le había devuelto. Se sentó en la cama y, tras sacarse de un seco puntapié sus deportivas, terminó de quitarse los pantalones. Nuevamente se puso en pié. Por fin; ahí tenía a mi querida Julia: frente a mí; espléndida; insinuante; joven; fresca; provocativa; preciosa y casi desnuda; apenas cubierta con unas braguitas y un sujetador. Me miraba fijamente y volvía a contemplar con toda su atención mi polla enhiesta, al tiempo que yo recorría todo su cuerpo con una lujuriosa mirada. ...
    ... Sus hombros desnudos, sus pechos hermosos bajo aquel sujetador y ahora también sus largas piernas y su vientre plano y delicioso. Los diecisiete juveniles años de Julia se mostraban ante mí en todo su esplendor: gloriosos. Sus mini braguitas resaltaban aún más su figura y, bajo ellas, su abultado monte de venus, reclamándome que lo hollara; que hiciera una excursión por él; que explorara, centímetro a centímetro, todo aquel terreno absolutamente desconocido todavía para mí; que no dejase ni un milímetro sin escudriñar. Todo eso lo imaginé ante la figura de Julia, casi desnuda, que tenía enfrente, al tiempo que mi mano se deslizaba a lo largo de mi falo, no para masturbarme: solo acariciándolo muy suavemente. Quedé alucinado ante aquella visión, absorto e incapaz de pronunciar una palabra. Lo que perseguí durante tanto tiempo, con tanto ahínco, urdiendo tramas, tendiendo señuelos y asediando a mi hermana para rendirla; lo que ansiaba contemplar; eso, precisamente eso, es lo que ahora tenía allí: MI HERMANITA JULIA, FRENTE A MÍ, A PUNTO DE QUEDAR COMPLETAMENTE DESNUDA, QUE ME MIRABA CON UN GESTO DESAFIANTE. Me quedé sin habla y sin aliento, boquiabierto por la sorpresa al ver mi anhelo al fin cumplido. En ese momento yo tan solo era un manojo de nervios, imaginando lo que sucedería después. Mi mente era un hervidero de ideas, a cual más descabellada. Julia quedó un momento quieta, mirando cómo yo me acariciaba la polla y entonces se giró, y me ofreció la visión de su espalda. Su ...
«1234...12»