EL INTERNADO (28) Chupada de Pollas en la Feria - Relatos Eróticos

EL INTERNADO (28) Chupada de Pollas en la Feria

... dos mientras les follaban las bocas, y en postura como si estuvieran meando. Una mano de Carmona se posó en el culo de Luis, con los dedos hundidos en el ojete, al mismo tiempo que le empujaba y presionaba con fuerza contra la boca de la chavala. Cuando ví aquello me puse a mil por hora, creía que la polla me iba a explotar de la excitación, . y saltó a mi mente todo lo que me contó mi hermano de su colega. Ahí, en ese momento supe, que al tío le gustaba mi hermano, y que le iba el royo con los tíos, y follar con ellos. El caso es que el colega le metía mano en el coño a la niñata, pero las dos tías dejaron muy claro desde el principio, que no follarían por abajo por que eran virgen, y que solo les chuparían la polla a los dos. Yo seguía grabando, paseándome alrededor de ellos, cogiendo primeros planos de sus pollones, de la cara de los dos gozando de placer, del vaiven de sus culos moviéndose, y sobre todo filmando esa mano del colega incrustada en el orificio anal de mi hermano. Era una competición entre machos, entre los dos haber quién destrozaba más fuerte las bocas de las mamonas, una puta rivalidad, una lucha por ser el mejor folla bocas del mundo, y el que se corriera primero. La cuestión es que fué alucinante cuando ganó mi hermano, Luis se corrió en la cara de la niñata, con los dedos de su coleguita penetrándole el ano, dos dedos metidos muy fuerte hasta la mitad, y su polla escupiendo trayazos de semen blanco y espeso, por todo el careto de la putilla. ...

... Seguidamente y en cuestión de segundos le tocó el turno al cabo Carmona, que agarrándose el pollón por la base, y apretando a lo bruto el tronco amoratado por la presión, se descargó de los huevazos, una buena ración de esperma calentito y cremoso. Después de la corrida las niñatas se fueron y nos quedamos los tres allí un momento, sentados en unas piedras fumándonos un porrito. Al cabo de un rato decidimos volver a la caseta y beber algo, pero antes de entrar Carmona quería mear, y yo también, estaba que reventaba, así que Luis se fué para pedir las bebidas y nosotros nos quedamos frente a la pared para aliviar la vejiga. El cabrón se espatarró frente a la pared y se sacó la verga. Yo me puse a su lado, he hice lo mismo sin dejar de mirarle disimuladamente aquel pedazo de manubrío, y sin quitarle el ojo al caño de orina que emanaba por la rajita del capullo. ¡Joder! . Allí mismo me hubría agachado, y gozando me hubíera dejado que me duchara con su meada amarilla. Pero me contuve y frené mis viciosos deseos, y solo me quedé contemplando de reojo. Se me pasaba por la mente, sacarle el tema de esa mano suya sobre el culo de mi hermano, y sus dedos surcando el delicioso ojete de Luis. CARMONA: Joder colega, estaba reventando. No me he corrido a gusto, nada más que pensando que me estaba meando, coño. NIKO: Jajaja, . Pués no lo parecía tío, . por que tu polla era como una manguera soltando chorros de leche sin parar. No veas como le has puesto a la putilla la cara de esperma, . le faltaba ...