David es montado por un macho de verdad - Relatos Eróticos

David es montado por un macho de verdad

... te gustaba la verga” se empezaba a poner un poco dominante pero era un juego sexual entre ellos, los dos lo sabían, disfrutaban el momento jugando sus roles, desde el principio hubo una conexión que les hizo ver su lugar a cada uno, no se necesitó preguntar por roles, ya desde el principio ambos sabía el lugar que ocupaba cada uno. Julián se levantó, tenia a David con el tronco doblado apoyado en sus piernas, parado. Comenzó a frotar su verga en la entrada de su amante, el precum ayudaba en la tarea, no quiso avisarle a David que estaba po penetrarle, cuando este sintió el ariete de su macho en lsu entrada se alejó rápidamente, quería sexo seguro, se lo dijo alejándose, Julián aceptó, lo probaba, quería verlo reaccionar pero de haberse dejado le hubiera invadido un morbo terrible al preñar al muchacho. Le gustaban así, putitos que tenían carácter, incluso ante su macho, le gustaba domarlos poco a poco, romper su resistencia y hacerlos suyos, David sacó un preservativo del auto y se lo dio a Julián que se lo colocó rápidamente, David se arrodilló ante aquel fuste y lo lubricó con su saliva, cuando estaba listo se puso de pie y se inclinó apoyándose en sus piernas, dejando su ojete vulnerable para ser profanado. Julián lo tomó de las caderas con una mano mientras se escupía en la otra y lubricaba aquel ano, tras hacerlo de nuevo con su verga coloco la cabeza en la entrada y lo tomó de las caderas, empujo con firmeza pero lento, cuando traspasó su ano David sintió tal dolor que ...

... le hizo suplicar que parara, Julian espero en su recto y Tras unos segundos prosiguió enterrándola toda, conquistando la virilidad de aquel muchacho. Comenzó a envestirlo lentamente, David solo gemía de dolor y de placer, Julián no lo tomaba en cuenta, solo le decía “¿pero querías verga no puto?” David sé éxito al oírlo, siempre quizo un macho que lo dominara así, haciéndole ver su lugar en la relación pero sin humillarle, gemía, le gustaba saberse entregado a aquel hombre, algunos nacen para dominar, otros para ser dominados. Julián salió de él, abrió la puerta trasera del auto y le hizo entrar, poniéndolo de espaldas, dejando su culo al borde del asiento, parado afuera tomó sus piernas y las apoyó en sus hombros y de una solo embestida entró en él, el dolor se volvió placer, se besaban como animales y David gemía ante las fuertes embestidas del macho alfa, la prostata de David se sentía agradecida, en ese instante los dos era fuego, un mismo fuego que se avivaba con cada embestida y cada mirada de morbo que mutuamente se dedicaban, Julián lo hacía su hembra entre gemidos besos y embestidas, puro sexo de hombres. Julián no superaba la cara de puto de David ante cada embestida, le gustaba tenerlo así, suyo y a su disposición, quería marcar su territorio, miró a David que tenía la boca abierta por los gemidos y dejó caer en su boca su saliva mientras lo miraba con mirada sexosa, David tragó aquel fluido sintiéndose dominado, sucio y poseido por aquel hombre que lo hacía suyo, ...