1. La primera vez que compartí a mi esposa


    Fecha: 24/11/2020, Categorías: Incesto Autor: rompeculitos69, Fuente: CuentoRelatos

    ... escotada que dejaba ver sus enormes senos, todo esto en color café claro que daba la apariencia de ella andar desnuda, realmente deliciosa, comimos empezamos a beber algunas cervezas y me sorprendió que ella iba a la par conmigo, tal vez para “darse valor” yo después de varias ya estaba mareado pero ella ya se veía más entonada, se podía ver ruborizada por el alcohol. Salimos de ahí y nos dirigimos al hotel acordado.
    
    Una vez entrando, nos tocó en un tercer piso creo, yo iba tras de ella y la vista era espectacular podía ver sus hermosas nalgas moverse debajo de esa minifalda de vuelo, con una diminuta tanga de hilo que desaparecía entre sus cachetes. Pensar que en poco tiempo ese culo seria ensartado por alguien más me ponía muy caliente. Entramos a la habitación y le llamé a Ricardo para decirle que ya estábamos ahí, el no taró mucho en tocar la puerta llevando una botella de alcohol, refrescos, hielos y vasos para convivir ahí dentro, cosa que nos pareció una excelente idea por parte de él.
    
    Sonia se sentó en la cama dejándonos ver sus hermosas piernas y el escote que llevaba en lo que charlábamos, bromeábamos y tomábamos unas copas, hasta que Ricardo tomó la iniciativa de tomarla de la mano y acercarla a él para que se sentara encima de el para sentir ese hermoso culo, así tomamos una o dos copas más hasta que el comenzó a acariciar sus piernas de abajo hacia arriba hasta llegar a su entrepierna para pasar a sobar sus tetas sobre la ropa. El ambiente se empezaba a ...
    ... calentar.
    
    Ricardo comenzó a sobar las tetas de mi mujer por debajo de la ropa, a ella le gustaba, se recostó completamente sobre él y cerró los ojos dejándose masajear a su antojo. Sonia comenzaba a mover su culo sobre el paquete de Ricardo, que para estas alturas ya debía tenerlo a todo lo que daba, con gran facilidad le sacó la blusa, le desabrochó el brasier y le dejó las tetas al descubierto para seguir sobándolas, apretándolas estrujándolas contra él.
    
    Mi amigo la hizo arrodillarse frente a él que permanecía sentado en lo que él se sacaba su verga del pantalón, no hubo que decir nada más Sonia comenzó a mamar una y otra vez, la vista era espectacular, él la tomaba del pelo mientras se la clavaba hasta los huevos con sus lindas tetas bamboleando por el movimiento. Ricardo en ocasiones la castigaba dejándole la verga hasta lo más profundo de su garganta de mi mujer haciendo que ella tuviera arcadas, otras veces la retiraba para restregarle su verga por toda la cara, cuello y tetas, haciendo que ella misma lo siguiera y buscara como un caramelo para seguir mamando.
    
    Supongo que Ricardo estaba a punto de venirse así que la levantó y la llevó a la cama, la recostó de lado, él se puso detrás, le levantó una pierna y la ensartó por el culo, ella solamente arqueaba su espalda y paraba el culo, tal vez de dolor, la tomó fuertemente de las tetas y comenzó a penetrarle el ano, primero muy suavemente, pero luego cambió el ritmo a fuertes embestidas que hacían que Sonia gimiera ...