1. Aprendiendo de los maestros


    Fecha: 23/11/2020, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... cinco de estatura. Toda una valkyria al lado de mi metro setenta. Por lo menos se habia tapado un poco con una camiseta.
    
    - Anda cariño, sientate ahí y enseñale las tetas a tu hermanito, que se estaba haciendo una pajita a tu salud, y yo se la voy a terminar.-
    
    - ¡Jo, mami!. Es que ahora está lo mejor del dia para ponerme morena. ¿ Que le pasa a este idiota?.¿ No se las puede hacer como siempre, mirandome en la piscina?.- Creo que mi corazón ya no latia.
    
    - Venga, no seas egoista, que es tu hermano pequeño. Para ti será un segundo, además se la voy a hacer yo y ya verás como tardo muy poquito. Tu siempre te corrias en seguida cuando te hacia deditos.-
    
    - ¡Jo mami!. Es que hace mucho que no hace sol.- Dijo ella haciendo pucheritos.
    
    Sin duda atraido por la conversación, mi padre hizo su entrada en escena. Ahora las cosas volverian a su sitio. Me pegaria un par de bofetones, y todo volveria a ser normal.
    
    - ¿ Que pasa familia?.- Preguntó al entrar por la puerta, imponente con su espesa barba canosa y la enorme tripa que asomaba por encima de sus bermudas. Parecia un oso de pecho velludo y brazos como jamones.
    
    - Nada cariño, que esta tonta no quiere enseñarle las tetas a su propio hermano para que yo le acabe una pajita, por que dice que quiere aprovechar el sol.- Dijo mi madre con total naturalidad.
    
    - Pues nada de eso señorita. ¿ Quien pagó esa operación de pecho?.- Preguntó el con seguridad.
    
    - Tu papi.- Respondió mi hermana con rostro compungido y mirando ...
    ... al suelo como una niña mala.
    
    - ¿ Y en que habiamos quedado?.-
    
    - Que si tu la pagabas, tu tendrias derecho a disfrutar de mis tetas cuando quisieras.-
    
    - Pues ese era el trato, y si no te gusta me devuelves los 12.000 Euros y en paz, yo me quedo con mi dinero, y tu con esas fantasticas tetas que son demasiado buenas para tu familia.-
    
    - Jo papi, que ya sabes que necesito el dinero para la entrada del fiat.- Dijo ella con tono de tontita.
    
    - Pues entonces ya sabes lo que te queda, compartir con tu familia.- Dijo mi padre tajante.
    
    - Valeeee...- Dijo ella, asintiendo y quitandose la camiseta, mostrandome aquellas tetas enormes y perfectas de quirofano.
    
    Mi madre empezó a menearme la poya, y entre aquella visión magnifica, y aquel suave movimiento, se me puso tiesa enseguida. Mi madre apretaba la poya con suavidad, y mantenia un ritmo constante y agradable. En sus tiempos debia haber sido una pajillera experta, y me estaba haciendo la mejor paja de mi vida. Era un cosquilleo que me subia hasta las tripas, con un placer que yo ni habia soñado. Todo el cuerpo me hormigueaba, y tenia convulsiones de puro placer. Placer en estado puro.
    
    Pero las cosas no habian acabado, por que mi padre se habia puesto cachondo también, y mientras mi madre me pajeaba habia empezado a toquetear las tetas de mi hermana.
    
    - ¿ Sabes que Susan?. Que creo que yo también voy a amortizar un poco mi inversión. Anda, tumbate.- Dijo empujandola sobre la cama con cara de salido y voz en tono ...