1. Anita en un hotel de Miami


    Fecha: 18/10/2020, Categorías: Anal Sexo con Maduras Sexo Interracial Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    ... porque sospechaba que esos dos cubanos tenían algo que ver con el repentino desvelo de Anita…Desde lejos vi la zona del jacuzzi. Allí adentro estaban Oliverio y Francisco… y naturalmente Anita riendo entre ambos. A la luz de la luna pude ver el reflejo de su piel ahora bronceada y noté que ya no llevaba la tanga puesta. Uno de los negros, Oliverio, se incorporó y pude ver que también estaba desnudo, con una enorme erección apuntando al cielo…Anita parecía estar más entusiasmada con el otro negro, Francisco. Pude ver que las delicadas manos de mi mujercita estaban bajo el agua, muy cerca del cuerpo de Francisco y no me quedaron dudas de que en ese momento ella le estaba haciendo una buena paja. El negro tenía los ojos cerrados y se estiraba hacia atrás.De repente Oliverio volvió a inclinarse sobre Ana y la hizo ponerse a cuatro patas, mientras ella no soltaba la verga de su amigo. Entonces se acomodó detrás de mi esposa y sin demasiados rodeos la tomó con firmeza por las caderas y se hundió en ella en un rápido sacudón de su cuerpo.Ana gimió con la embestida, pero enseguida comenzó a balancear su culo contra la verga de Oliverio.Al mismo tiempo Francisco se puso de rodillas, sacó su enorme verga negra del agua y se la metió a Ana entre los labios, haciendo que mi mujercita se la chupara.Cinco minutos después de bombearla salvajemente, Oliverio se arqueó hacia atrás y gimió lentamente. Supe entonces que se había derramado en la concha de Anita. Ella se quedó quieta en la ...
    ... misma posición, mientras los dos hombres intercambiaban sus lugares.Francisco ahora tenía su verga negra muy endurecida gracias a la acción bucal de Ana; sin perder tiempo también él se enterró en la dulce vagina de Ana, haciendo que ella saltara hacia adelante por la feroz embestida inicial.Decidí que ya había visto bastante. Tenía mi verga dura de ver a esos dos negros cogiéndose a mi esposa; así que muy lentamente y sin hacer ruido me alejé del lugar. Me encerré en el baño de nuestra habitación, donde me hice una tremenda paja que me alivió la calentura de ver a Anita gozando con esas dos increíbles vergas negras.Me acosté a mirar televisión y más tarde me despabilé con el ruido de la puerta de entrada, a pesar de que Anita estaba intentando disminuir al máximo los sonidos. Le pregunté cómo le había ido y muy sonriente me contestó que ahora estaba bien relajada… y que mañana sería otro día…Por la mañana me desperté temprano y se me ocurrió espiar el cuerpo de mi mujercita bajo las sábanas. Ana tenía los labios vaginales bien dilatados y enrojecidos, señal de que había tenido una buena actividad con semejantes vergas negras. Su entrada trasera estaba bien cerrada y no había signos de dilatación, por lo tanto me imaginé que esos dos “inocentes muchachitos” no habían disfrutado del hermoso culo de Ana. No pude ver restos de semen, pero me imaginé que antes de regresar, Ana se había quedado un rato disfrutando de la calidez del jacuzzi…Después de desayunar le dije a Ana que me ...