1. Mi primo se aprovecha de mi inocencia


    Fecha: 18/09/2020, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    Me siento muy emocionado de poder contar mi primer relato, quiero que sepan que voy a omitir nombres y algunos detalles, pero es completamente real. Esto me pasó cuando yo tenía 9 años, estas fechas me recuerdan siempre mi inicio y me traen ese sentimiento de culpa que si bien sé que no tuve, es algo que no se quita. Me describo un poco, siempre fui muy pequeño y algo gordito con piernas y cola, pero de hombros y espalda chicos. Me gustaba usar el flequillo al costado por la moda de ese entonces y era muy afeminado. Es decir, muy similar a ahora, pero en versión pequeña Jaja. Siempre tuve una familia bastante unida y vinieron a pasar las vacaciones de invierno un primo de mi papá. Yo estaba emocionado, me encantaba cómo me trataban siempre de princesa y me cuidaban. Mis tíos, mi primo de 16 años, muy blanco de pelo negro y pecas, muy delgado de 1.76 y el aspecto de chico raro y callado. Mi prima de 14 morocha, alta de 1.70 más o menos, con cuerpo bastante proporcionado. Y el mayor de 19 años, con aspecto de hippie, de 1.80 color trigueño, pelo negro y de cuerpo algo marcado. Los días pasaban normal, las típicas noches de primos con mis hermanos mayores, cenas, risas, paseos por la ciudad, cine, teatro, cosas normales. Pero al pasar la primer semana, sentía que mi primo de 16 años me seguía mucho, siempre quería alzarme y rozarme la cola. Yo no entendía bien por qué, pero me gustaba que siempre esté conmigo y me enseñe a jugar a la ps2, ya que mi hermano de 20 y sus amigos no ...
    ... lo hacían. Una tarde, que me dormí más de la cuenta, desperté y todos habían salido, sólo estaban mi primo y mi prima. -No saben dónde están los demás? No escuché nada. - Les pregunté confuso, todavía en pijama que usaba muy al cuerpo. -Salieron al Abasto (Un shopping conocido). Seguro llegan a la tarde. - Me decía mi primo y me sentaba en su pierna a desayunar. Mientrabas tomaba leche y galletitas, sentí como me pasaba su mano por mi colita, mientras su hermana veía la tele. No entendía por qué hacía eso, me sentía raro. Quise bajarme, y él me presionó más. -Shh. quedate, sólo me gusta tu pijama. - Me decía en el oído, casi susurrando. -Mejor veamos una película los tres, va a ser más divertido. - Se me ocurrió para que deje de hacer eso, y hablé fuerte. -Sí, vamos a la pieza. Quiero ver el Titanic. - Mi prima corrió a la habitación y yo la seguí. La película la veíamos en DVD, los tres acostados y mi primo se había calmado. Pensé que sólo fue por mi pijamita de tela suave. Pero en un momento mi prima se levantó al baño y quedamos solos. -Bebé, acercate que no quiero mirar solo. - Mi primo me traía hacia él con su brazo. No podía hacer más que mirar la película y esperar que se calme de nuevo. -Uh qué pasó? Tenés sucio acá mirá. - Sin darme tiempo a responder, me levantó el buzo de mi pijama y se puso como loco a besarme mis pequeños pezoncitos, a morderlos, no lo reconocía. Estuvo así como 3 minutos, parecía un perro hambriento. Y empezó a tocarme la cola, metiendo su mano ...
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