1. Una Madre Ejemplar


    Fecha: 15/09/2020, Categorías: Incesto Autor: DanteCry, Fuente: SexoSinTabues

    ... Sebastián y lo besé en la boca. Su primer beso de adultos con mama pensé yo. El me sonrió tímidamente con su cara todavía sonrojada. Me moría de ganas de sentarme en la verga de Sebastián, y lo hice. Primero froté su glande una y otra vez en mis labios vaginales y luego en “mi entradita”,cuando noté que estaba mas que lubricada, me lo metí, bajando poco a poco, no quería lastimarlo en su primera vez. Tal vez no tenia el enorme tamaño de uno de mis dildos o el grosor, pero sentir como la verga de mi hijo entraba poco a poco dentro mio me hizo poner cachonda al extremo. Cuando su verga estuvo toda dentro de mi vagina comencé a moverme, arriba y abajo, arriba y abajo. Que durita estaba su verga, que caliente. Sebas estaba ruborizado, jadeaba y respiraba entre suspiros, sus manos se posaron ¿Inocentemente? En mi cintura mientras yo seguía cabalgando su verga. Si mis amigas hubiera podido verme en ese momento, hace unos día atrás me escandalizaba la idea del sexo entre madre e hijo, y ahora aquí estaba yo, cabalgado su verga de niño en el sofá de la sala. Luego de unos minutos me levanté, Sebastián no había eyaculado aún, mi vagina seguía palpitante luego de recibir la verga de mi hijo. -Vamos a continuar en mi cama, sebas-. Le dije tomándolo de una mano y llevándolo a mi habitacional. En el sofá fui un poco egoísta, no dejé que mi hijo viera mi vagina, así que ya en habitación, me recosté en mi cama y separé mis piernas, pidiéndole a Sebastián que mirara mi vagina, un poco ...
    ... dilatada luego de cabalgarlo. -¿Te gusta lo que ves, amor? Le pregunté separando mis labios vaginales con mis dedos. Y enseñándole a Sebastián el hermoso color rosado del interior. ¿Estaría disfrutando del espectáculo? No despegó la vista de mi vagina ni un solo segundo. Recordé que le daba vergüenza la palabra verga, asi que. - Sebas, intentá meter tu pito aquí, te quiero dentro mio-. Suspiré melosa. -No sé como, mama-. Me respondió con tanta inocencia que me morí de amor. - Yo te ayudo, amor, ven aquí entre mis piernas-. Cuando estuvo entre entre ellas, tomé su verga y comencé a frotarla en mi vagina, viendo su carita roja de …. ¿excitación? Como le gustaba eso a mi bebe. - Ahora sebas, empuja. Hacelo, dulzura-. Dije con un gemido. Él lo hacia temeroso y muy despacio. - No tengas miedo, amor. No me vas a lastimas, no me duele para nada, me gusta-. Él Siguió empujado -Eso es. - Gemí de nuevo. -Te puedo sentir Sebas, tu pito esta todo dentro de mami- Exclamé mientras sentía como mi vagina apretaba su verga. - Ahora bebe, ¿por qué no tratas de mover tus caderas? Intenta bombear su pito dentro y fuera Sebastián comenzó a moverse, primero lento y fue aumentando el ritmo poco a poco. ¡Vengan a verme queridas amigas! Miren como mi bebe le bombea la vagina su mami. Que carita de placer que puso cuando yo apreté sus nalgas con mis manos, haciendo que sus embestidas fueran más fuertes y más profundas. Mis gemidos de placer y los suaves suspiros de Sebas fueron la música de nuestra primera ...
«12...567...»