1. LOS PEDOS, Mi mayor exitación


    Fecha: 11/09/2020, Categorías: Fetichismo Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    Nunca lo hubiera imaginado, y aunque ya me había ocurrido en que alguna veces las chicas con quién tuve sexo se habían soltado algunos, la verdad me era hasta cierto punto indiferente pues no me molestaba pero tampoco era algo que me llegara más alla a una simple anécdota, y de paso generalmente a las chicas les causaba pena y vergüenza. Todo cambio cuando empecé a salir con la que hoy es mi mujer, cuando nos dábamos unas encerronas en los hoteles, con ella fue que disfrute y disfruto de dar el beso negro entre otras cosas y por su puesto el disfrutar de cuando se pedorrea mientras la penetró. Una de esas muchas ocasiones, nos encontrábamos cogiendo frenéticamente, excitados ambos y disfrutandolo, de pronto la tenía en cuatro, y en un movimiento brusco mi verga se salió de su vagina, me coloque de nuevo tras ella para penetrarla y le ví su ojete prieto, arrugado y virgen, ese ojete que siempre me gustaba jugar dedeandolo pero que no me permitía coger. En ese momento no lo pensé dos veces, le abrí las nalgas y metí mi lengua en el, era algo que no se esperaba pero que tampoco rechazó, gemía y hasta gritaba, me pedía que siguiera, yo me encontraba súper excitado y no paraba de meterle mi lengua y acariciarselo con los dedos, en respiro que me di, al momento de querer meter mi lengua de nuevo, ...
    ... ocurrió lo que menos hubiera imaginado, me soltó en la. carabun enorme y sonoro pedo, que lejos de disgustarme me éxito más, mucho mas. Le volví a mamar su culito y ella igual estaba excitada a más no poder, y de pronto empezó a gemir más fuerte alcanzando su orgasmo. Me volví a acomodar tras ella y se la metí con furia, mis testículos rebotaban en sus nalgas causando incluso un leve dolor al hacerlo pero yo no cedía en mis embestidas hasta que terminé. Una vez que nos recuperamos y estábamos abrazados, le bese en la boca y ella me correspondió al beso. De pronto se me ocurrió decirle sonriendo que ese beso debió saberle a pedo Lejos de molestarse le dió cierta risa y se disculpó por lo sucedido -No te disculpes mi niña (siempre le he dicho así de cariño en la intimidad pues soy 15 años mayor que ella) te confieso que más que molestarme me excitó Abrió sus ojos sorprendida pero con un gesto indescifrable, lo que mi hizo pensar que a ella igual le agradó. A partir de esa fecha, cada que tenemos sexo (ya sea con ella y otras mujeres) la estímulo a que me suelte al menos un pedo, y es que sentir el aire en mis testículos o ingle me provoca algo más que una simple excitación, y es que más allá de que pueda ser un olor desagradable, hay que dejarse llevar por el gusto, por romper ciertos tabúes 
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